Podemos está a la espera de una llamada de Pedro Sánchez para volver a retomar las negociaciones en el punto en el que se quedaron. Es decir, discutiendo qué asientos ocuparán los morados en el próximo Consejo de Ministros. Pero ese momento parece bastante improbable después de que el presidente del Gobierno haya enumerado toda una lista de razones para rechazar la coalición. Unos motivos que el partido de Pablo Iglesias no considera fundados y que el secretario de Acción de Gobierno, Pablo Echenique, tachó de «enésima excusa».

«Desconfianza de quien le hizo presidente y con quien pactó los Presupuestos más sociales de la democracia», ironizó a través de Twitter el número tres de la formación haciendo referencia a las declaraciones del secretario general del PSOE, tras reunirse con el Rey, en las que apuntó a un recelo «recíproco» entre su partido y Unidas Podemos. «Sánchez debería hacer los deberes, trabajarse los apoyos y dejar de buscar excusas», escribió Echenique en el mismo mensaje. Un cometido que, consideró, está evitando para mirar a un posible entendimiento con Ciudadanos o a una repetición electoral.

Más duro se mostró el secretario de Comunicación morado, Juanma del Olmo. En la misma red social reprochó al presidente en funciones que mantenga el «chantaje» de los últimos meses: «o hacéis lo que yo digo o a elecciones», resumió. Del Olmo sumó a la lista de críticas a Sánchez el haber sucumbido a las presiones de «los que mandan sin presentarse a las elecciones». «Sigue buscando acuerdo con la derecha», concluyó.

UN EXTENSO DOCUMENTO / No obstante, en Podemos parecen dispuestos a esperar, en silencio y sin grandes apariciones mediáticas, a que Sánchez coja el teléfono y se reanuden las conversaciones. Fuentes del partido morado aseguran que, llegado el momento, tienen preparado un documento programático extenso para avanzar rápido. Algo que, apuntaron, no servirá de nada si no se pone sobre la mesa la formación de un Ejecutivo bicolor (PSOE-Unidas Podemos) tal como vienen reclamando desde la negociación de la fallida investidura de julio pasado. No obstante, siguen sin tener contacto con los socialistas y la situación sigue estancada a la espera de que el PSOE dé el primer paso.