El anuncio de reforma constitucional es visto por Podemos como la constatación de que Pedro Sánchez ha abandonado el espíritu impugnador de las primarias del PSOE y ha vuelto al viejo orden bipartidista. Más allá de la crítica, la formación de Pablo Iglesias no ha abundado en detalles sobre su propuesta para modificar la Carta Magna desde que los socialistas desvelaran su intención, el miércoles, a pesar de que esa revisión fue el eje vertebrador del programa electoral podemista en 20-D y el 26-J.

Los morados nacieron en el 2014 con la propuesta de un proceso constituyente para elaborar una nueva ley fundamental. Sin embargo, a escasos dos meses de las elecciones, renunciaron a esa exigencia, al considerar que no existía suficiente consenso en la sociedad para sostenerla y pasaron a reclamar cinco cambios en la actual Constitución. Sus socios en Cataluña, los 'comuns', siguen apostando por el proceso constituyente.

El anuncio de reforma constitucional es visto por Podemos como la constatación de que Pedro Sánchez ha abandonado el espíritu impugnador de las primarias del PSOE y ha vuelto al viejo orden bipartidista. Más allá de la crítica, la formación de Pablo Iglesias no ha abundado en detalles sobre su propuesta para modificar la Carta Magna desde que los socialistas desvelaran su intención, el miércoles, a pesar de que esa revisión fue el eje vertebrador del programa electoral podemista en 20-D y el 26-J.

Los morados nacieron en el 2014 con la propuesta de un proceso constituyente para elaborar una nueva ley fundamental. Sin embargo, a escasos dos meses de las elecciones, renunciaron a esa exigencia, al considerar que no existía suficiente consenso en la sociedad para sostenerla y pasaron a reclamar cinco cambios en la actual Constitución. Sus socios en Cataluña, los 'comuns', siguen apostando por el proceso constituyente.