El Partido Popular atribuye las declaraciones de Alberto Garre, en las que considera que el líder del partido, Mariano Rajoy, debe dar un paso atrás, al enfado del expresidente de Murcia por no haber concurrido en las listas de las elecciones generales, en las que quería ser candidato al Senado.

Fuentes de la dirección nacional del PP han asegurado a Efe que esa es la razón por la que Garre ha hecho estas manifestaciones.

En declaraciones a la Cadena Ser y al diario El Español, Garre ha pedido al presidente del Gobierno en funciones que "dé un paso atrás" para proponer a otra persona al frente del partido, y ha asegurado que "hay un clamor silencioso" en el PP con este reclamo.

Desde la dirección nacional del partido apuntan que Garre quería ir en las listas del Senado pero la dirección regional no lo eligió, de ahí su enfado con la organización y sus palabras sobre Rajoy.

Señalan estas fuentes que el expresidente regional lleva más de un año sin acudir a las juntas directivas del partido en Murcia.

Y recuerdan que en la última de esas reuniones, a la que asistió el propio Rajoy -el pasado 13 de febrero- todos los dirigentes del PP en la región dieron su apoyo "entusiasta" al presidente del Gobierno en funciones.

Alberto Garre fue, en marzo de 2014, la persona elegida por Ramón Luis Valcárcel para ocupar la Presidencia de Murcia cuando el entonces jefe del Ejecutivo regional dejó el cargo para concurrir en las listas del PP a las elecciones europeas. La designación de Garre fue ratificada por la junta directiva del PP murciano.

Un año después, en las elecciones autonómicas, no fue Garre, sino Pedro Antonio Sánchez, el elegido para ser candidato a la Presidencia de la región. Sánchez ganó las elecciones y se convirtió en jefe del Ejecutivo regional con los votos de su partido y de Ciudadanos.

Según la dirección nacional del PP, Garre sabía que no iba a ser él, sino Pedro Antonio Sánchez, la persona elegida por Mariano Rajoy para concurrir a las elecciones autonómicas, por lo que no atribuyen su enfado a aquella decisión.

Consideran que se debe a que el expresidente quiso concurrir a las elecciones generales como candidato al Senado -como lo hicieron la mayoría de los expresidentes autonómicos del partido- pero la dirección regional del PP optó por no ponerlo en la lista.

En el PP restan por tanto importancia a las palabras del expresidente regional, por considerar que se deben a razones personales y no provienen, además, de alguien que ya no tiene responsabilidades en el partido.

Las declaraciones de Garre se suman a otras que hizo ayer el vicepresidente tercero de la Diputación de Alicante, Alejandro Morant -también del PP- quien desde su cuenta de Facebook pidió a Mariano Rajoy que "deje paso a otras personas al frente del PP" para que, en el caso de no alcanzarse un pacto, "traten de formar gobierno con otras fuerzas políticas".

Después, en declaraciones a Efe, Morant aseguró que no pide la dimisión de Rajoy sino que su deseo es que logre seguir en el cargo cuatro años más, aunque añadió que "si no hubiera acuerdo" en los dos meses que quedan para negociar el presidente debería "estudiar la posibilidad de apartarse, si él considera que pudiera ser un perjuicio para su partido y para España".

"Prefiero que Rajoy sea el presidente, pero si no avanza la negociación creo que debería estudiar dejar paso a otras personas (del PP) con el fin de conseguir un gobierno estable", dijo Morant.