El PP ha decidido escudarse en la presión del PSOE para justificar que deje a Vox fuera de las presidencias de las mesas de las comisiones del Congreso. Fuentes de la dirección del grupo conservador aseguraron que el PSOE les ha cedido siete de ellas (en total son 33) y les han invitado a compartir alguna con Ciudadanos, pero no con el partido de ultraderecha. Si lo hacen, añadieron esas fuentes, los socialistas les han amenazado con dejarles sin ninguna.

«Una vez más el problema no es solo que se aplique el rodillo, sino que lo acepten otros», denunció el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros. Tras la reunión de la Junta de Portavoces del Congreso, Espinosa declaró que en su partido ya intuían que el PSOE les iba a «vetar» en el reparto de los puestos de responsabilidad en las comisiones, pero lamentó que otros grupos, en alusión al PP y «su filial de Ciudadanos», lo acepten.

La presidencia de esos órganos dan una visibilidad, en la organización y la moderación de los debates, con la que Vox parece que no va a poder contar. La portavoz del Grupo Socialista, Adriana Lastra, ya confirmó ayer que no hay posibilidades de que Vox presida alguna de ellas.

COMISIONES LEGISLATIVAS / El próximo viernes se configurarán las comisiones legislativas (21 de las 33, el resto la semana siguiente). Los socialistas se han reservado 17 presidencias y han garantizado varias a sus socios de investidura: seis a Unidas Podemos, una a ERC y una al PNV. El resto, algo menos de una decena, se han ofrecido al PP para que se reparta con Ciudadanos, pero con la amenaza de que, si el Grupo Popular cede alguna a Vox, la mayoría que forman el PSOE y sus aliados lo impedirían. En concreto, tendrá siete, algunas de relevancia, como las de Hacienda, Sanidad, Economía y Defensa.

Será el momento de comprobar si ese cordón sanitario en torno a las presidencias se culmina y también si el partido de Santiago Abascal ha rechazado asumir alguno de los otros cuatro puestos de cada mesa: dos vicepresidencias y dos secretarías. El PP está dispuesto a cederle algunos de esos cargos, de segundo plano, aunque fuentes de la dirección del grupo no descartaron que Vox apueste por rechazarlos para hacerse «las víctimas».

Según Espinosa de los Monteros, su formación debería ocupar el 15% de los puestos de acuerdo a su representación en el arco parlamentario (52 escaños), lo que le supondría contar con cinco presidencias, 10 vicepresidencias y 16 secretarías. El reparto, sin embargo, nunca ha sido proporcional con el número de diputados, recuerdan los populares (89 diputados).

El PP, por su parte, ha prometido ser «generoso» en la negociación, pero más que de las presidencias de comisión, prefiere hablar de las mesas en su conjunto, dando entrada a Vox en vicepresidencias y en secretarías como hizo el año pasado.

«La negociación está abierta --señaló ayer la portavoz del Grupo Popular, Cayetana Álvarez de Toledo-. Debe ser una negociación global y debe hablarse sobre todos los puestos de las comisiones».

El grupo popular no ha dado a conocer qué diputados asumirán las presidencias de dichos órganos a pesar de que el PSOE y Unidas Podemos sí lo ha hecho. El primero en divulgarlos fue el grupo socialista. Exministras como Magdalena Valerio y María Luisa Carcedo se situarán en las presidencias de las comisiones de Seguimiento del Pacto de Toledo y de Política Territorial, respectivamente. Otros exaltos cargos del anterior Gobierno de Pedro Sánchez tendrá un destino similar, caso de la secretaria de Estado de Seguridad hasta hace unas semanas, la valenciana Ana Botella, que estará al frente de la Comisión de Interior.

Fuentes de Unidas Podemos no ocultan su satisfacción por haber obtenido la dirección de comisiones que se prevén relevantes, como las de Trabajo o Transición Ecológica, ámbito preferente del Gobierno de Pedro Sánchez.

Lo será, igualmente, la de Presupuestos, toda vez que es el órgano encargado de organizar ldicha tramitación.