El bloqueo político tras la investidura fallida de Pedro Sánchez y el mensaje del Rey el domingo, cuando animó a los políticos a ponerse de acuerdo para evitar la repetición de las elecciones, están agudizando el ingenio de los partidos. El PP aprovechó ayer el aviso de Felipe VI para arrimar el ascua a su sardina, y planteó como fórmula para superar la situación que el Monarca proponga como presidente del Gobierno a un candidato distinto.

Según el secretario general del partido, Teodoro García Egea, el líder socialista es el «elemento de bloqueo» de la democracia porque «no es de fiar», por lo que abrió la puerta a una persona «de consenso». «El dilema no es entre Pedro Sánchez y elecciones, el dilema es si hoy tenemos un candidato que suscite la confianza de todo el arco palamentario. Pedro Sánchez hoy es presidente del Gobierno, pero los que le hicieron presidente hace un año no se fían de él, y por eso le dijeron no en junio y, bajo mi punto de vista, le pueden decir que no en septiembre», opinó. La respuesta socialista fue rápida. La hizo el ministro de Fomento y secretario de organización, José Luis Ábalos, que la consideró «un chiste» propio del «terreno de la fantasía».

DE CONSENSO / En este sentido, abrió la puerta a que ese «candidato de consenso» no sea del PSOE, y también planteó que se deje gobernar a una alianza entre el PP y Ciudadanos con la abstención del resto de partidos constitucionalistas, empezando por el PSOE. En opinión de García Egea, la llegada de María Chivite, la candidata socialista, a la presidencia de Navarra con la abstención de varios diputados autonómicos de Bildu demuestra que el PSOE y Sánchez «no son de fiar», y que por ello el PP «no puede abstenerse» si el actual presidente vuelve a intentar su investidura en las próximas semanas.

Fuentes del partido insistieron a Europa Press que el PP «no va a facilitar en ningún caso la investidura» de un candidato socialista. Según esas voces, García Egea quiso dejar claro con su propuesta que, a la vista de la «incapacidad» de Sánchez para llegar a un acuerdo, tal vez el problema sea él, y que otro candidato del PSOE «sí podría llegar a un acuerdo con sus aliados naturales, empezando por Podemos, como ya hace en comunidades y ayuntamientos». En cualquier caso, el PP está «de acuerdo» con el Rey en que «lo ideal» sería que los ciudadanos no tengan que volver a votar en unas nuevas generales.

EL MENSAJE SEGÚN CIUDADANOS / Ciudadanos enfocó el mensaje del Rey a los partidos desde otro punto de vista. El portavoz adjunto del partido en el Congreso, Edmundo Bal, cree que las palabras de Felipe VI son un «exhorto» al candidato socialista a que «cumpla» con el encargo que recibió para formar Gobierno. En una entrevista en Onda Cero, Bal calificó de «muy razonables» y «dentro de su papel» las declaraciones del Monarca, y afirmó que no puede inferirse de ellas que esté inmiscuyéndose en el debate político o decantándose por una u otra solución concreta. Bal recordó que la investidura del candidato socialista fracasó «por muy poco». «Parece mentira que por media silla, medio ministerio, estemos en agosto como estamos», apuntó recordando que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, hizo su última oferta desde la misma tribuna del Congreso.

Por su parte, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ve «responsable y prudente» la llamada del Rey y afirma que no vería mal un acuerdo «a la portuguesa» si fuese con las medidas del gobierno portugués, si bien duda de que esto fuese apoyado por un Ejecutivo entre PSOE y Podemos. No obstante, recordó que si finalmente no es posible este acuerdo, «la Constitución marca que se celebren unas nuevas elecciones generales».