El candidato de los populares, Xavier García Albiol, ha anunicado este miércoles que si llega a la Generalitat cerrará o fusionará hasta un 60% de los casi 400 organismos y sociedades que tiene la administración pública catalana. La propuesta responde a su voluntad de poner "punto y final" a todo aquelló que edificó el Govern de Junts pel Sí, lo que tacha de "chiringuitos independentistas" y que, para él,"no sirven para nada" y solo se dedican a "pagar nóminas de quienes se dedican a hablar mal de España en todos los territorios". También pretende reducir la cifra de cargos de confianza y de dirección de la Generalitat por "dar asesoramiento o apoyo nada justificado a dirigentes de ERC o el PDECat".

Albiol se ha paseado este jueves por el mercadillo de Sant Cosme de El Prat de Llobregat (Barcelona) para ejemplificar lo que considera un duelo de realidades. De un lado, las personas que se ha cruzado en su paseo, a los que ha tildado de "catalanes normales, con problemas e inquietudes normales, que lo único que pretenden es vivir en paz con el máximo de libertad y naturalidad". De otro, los que han "peregrinado" a Bruselas, dejándose llevar por un "encantador de serpientes", en alusión a Puigdemont, para defender a unos dirigentes "que han intentado llevar a cabo un golpe de Estado". Para Albiol, la marcha convocada en el corazón de Europa es un "espectáculo de lo más esperpéntico" que da "una imagen de ridículo".

Junto al candidato del PPC, el presidente de los populares en Andalucía, Juanma Moreno, ha recalcado que los lazos de "fraternidad y amor" que unen a catalanes y andaluces y ha subrayado que "nadie tiene derecho a romper estos vínculos". Por otra parte, ha metido el dedo en la llaga del PSC y ha asegurado que Susana Díaz no está presente en la campaña catalana porque "Iceta no le deja venir". "El PSC no dice lo mismo en todos los rincones de España. Cuidadito con la letra pequeña", ha zanjado.

Un voto, un polvorón

"¿Quiere un polvorón?", ha preguntado Albiol a todo aquel que se le cruzaba. Y, tras el asentimiento, requería entonces el número de personas que habitan en el mismo núcleo familiar. "Tome: un voto, un polvorón. Ya está preparado, no se equivoque de papeleta", advertía entonces. "Ah, para endulzar la vida", respondían algunos.

El popular preguntaba especialmente por el lugar de origen y atendía a totas las dudas. "¿Por qué no encierran a Puigdemont?", le ha lanzado una señora. "Porque no está condenado. Cuando vuelva aquí ya le cogerán. Ahora no puede mandar nada. Ya puede dar vueltas por Europa porque no las va a dar por España", ha espetado.

"No hables más que te van a quitar la paga", le ha alertado su fiel compañera ante el alud de preguntas al candidato. "Al contrario, somos la garantía de que no te la quiten", ha sonreído Albiol.