La reunión, este lunes, del pleno del Tribunal Constitucional(TC) para estudiar la solicitud del Gobierno central de abrir la vía penal contra la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, no ha dejado a ningún partido indeferente. Así, mientras los partidos independentistas han considerado que la actuación del TC responde a criterios políticos, el PSOE ha censurado la judicalización de la crisis política en Catalunya aunque manifestado su respeto hacia la resolución que pueda adoptar el TC y el PP ha defendido el recurso del Gobierno.
EL PSOE PIDE DIÁLOGO POLÍTICO
La secretaria de estudios y programas del PSOE, Meritxell Batet, ha asegurado este lunes en declaraciones a Antena 3, que "judicializar" la crisis política de Catalunya recurriendo al TC no va a contribuir a encontrar "las soluciones políticas" que se requieren. En este sentido, Batet ha criticado la actuación del Ejecutivo español y ha asegurado que "a un problema político hay que aportar soluciones políticas, que no es lo que hace el Gobierno de España".
Pese a estar en desacuerdo con la decisión tomada por el Consejo de Ministros, la dirigente socialista ha subrayado que el PSOE "siempre estará al lado del Gobierno para defender el cumplimiento de la ley por parte de las instituciones".
Sobre este aspecto también se ha pronunciado Óscar López, portavoz del PSOE en el Senado, que ha asegurado en declaraciones a cadena SER, que su partido respetará la decisión del TC. López ha recordado que los socialistas rechazaron la "reforma exprés" aprobada a finales del 2015 que concedía al alto tribunal la capacidad de hacer cumplir sus resoluciones, pero ha asegurado que acatarán las decisiones de dicho tribunal. El dirigente ha aprovechado para insistir en que el paso dado por el Parlament en favor de la desconexión es "un profundo error".
EL PP DEFIENDE LA VÍA JUDICIAL
Andrea Levy, vicesecretaria de estudios y programas del PP, ha revalidado la decisión del Gobierno en funciones y ha asegurado en declaraciones a TVE que "las instituciones del Estado velarán para que no se lleven a cabo actos ilegales que van en contra de todos". En referencia a la intensidad de la respuesta del Gobierno, Levy ha asegurado que debe haber cortesía parlamentaria pero ha cuestionado "cómo puede respetarse a quien está rompiendo las reglas del juego".
