El portavoz adjunto del PSOE en el Congreso Felipe Sicilia lamentó ayer el protagonismo que está cobrando las «trifulcas» en la Cámara Baja en las últimas semanas y pidió desterrar las intervenciones «soeces e «insultantes» y las «faltas de respeto» en general. En una entrevista con el programa Parlamento de RNE, Sicilia considera que no debería ser «complicado» rebajar el clima de crispación que se vive en el Parlamento porque no solo es una demanda de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, sino de toda la ciudadanía.

«Estamos obligados a hablar, a discutir y a confrontar ideas pero eso se puede hacer con educación y respeto», defendió el diputado socialista, quien expresó su deseo de que esto se acabe imponiendo para se hable de las medidas necesarias para paliar la crisis social y económica del coronavirus, y no de las «trifulcas». «No debería costarnos», insistió.

Preguntado sobre si, en este ambiente, ve complicado entenderse con el PP, Sicilia subrayó que su partido «siempre» ha tendido la mano a los populares y aunque reconoció que hay cuestiones en las que resulta «difícil» que se pongan de acuerdo en el terreno económico o laboral, hay «otras muchas» cuestiones de Estado en las que sí hay espacio para el diálogo. Y puso como ejemplo los acuerdos en materia de lucha contra el terrorismo y de política internacional.

El presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), José Félix Tezanos, también se pronunció ayer acerca del clima político del país y señaló que resultan especialmente inquietantes las «posiciones antisistema» de diversos «proto-líderes españoles» que alientan escraches agresivos y estrategias de caceroladas «para intentar lograr por la vía del odio, el insulto y el extremismo lo que no logran --no han logrado- por la vía de las urnas». Además, les acusó de que el mensaje que están lanzando cuando se niegan a respaldar en el Parlamento las medidas cautelares del estado de alarma es que el peligro del coronavirus «es un asunto sin importancia».