PSOE y Podemos no conciben que Ciudadanos se conforme con la dimisión de Cristina Cifuentes y decida avalar al próximo candidato que proponga el PP para sustituirla. Las fuerzas progresistas iniciaron este miércoles una campaña de presión para forzar al líder de los liberales, Albert Rivera, a reconsiderar su posición para que el partido en el Gobierno no zanje el escándalo con un mero cambio de cromos. Por el momento, el llamamiento no obtiene respuesta. Cs solo pide un candidato «limpio» para presidir la Comunidad de Madrid y admite que «el cambio» no llega ahora, sino que habrá que esperar a las elecciones del 2019.

Ni el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ni el candidato de Podemos, parecen dispuestos a rendirse. Conocen bien la resistencia de Cs, pero también saben que Rivera varió de posición política al pasar de rechazar la moción de censura a apoyarla. Con la dimisión de Cifuentes esa iniciativa decae, y deberá celebrarse un pleno de investidura en un máximo de tres semanas.

El secretario general del PSOE envió un mensaje a Rivera para pedirle que recapacite. «Esta no es una cuestión de un nombre», sino un «caso de corrupción generalizada en el PP», defendió. Errejón tampoco está dispuesto a aceptar al sustituto de Cifuentes que el PP designe. Ayer pidió a PSOE y Cs un acuerdo para elegir a un candidato alternativo, puesto que consideran que el partido conservador no puede continuar encabezando el Gobierno regional después de «chantajear» a la dimitida. «No quiero que el destino de la Comunidad de Madrid lo decida quien guarda un video durante siete años como chantaje», defendió Errejón.

Ciudadanos se dan por satisfechos con el precipitado adiós y piden que el PP acelere para desvelar «lo antes posible» qué dirigente sustutuye a la presidenta dimitida hasta las elecciones autonómicas de mayo del 2019.

No se lo plantean otro escenario, como reclaman Sánchez y Errejón. «Ha sucedido la opción más correcta. Ahora se abre un plazo de negociación con el PP para que propongan un candidato alternativo que, de forma interina, gobierne la Comunidad de Madrid. Espero que esas conversaciones se inicien lo antes posible», defendió el portavoz de Cs en la Asamblea, Ignacio Aguado.

CALENDARIO: 22 DÍA / Una vez el PP proponga un candidato, la presidenta de la Asamblea de Madrid, Paloma Adrados, dispone de 15 días para conversar con los grupos y valorar si hay consenso. El pleno de investidura debe celebrarse antes de 22 días. Se requiere mayoría absoluta (65 votos) en primera votación y, de no conseguirla, es suficiente la mayoría simple en segunda votación, 48 horas después.

El PP no dispone de fuerza suficiente (48 escaños) y depende de los 17 de Ciudadanos. La suma de PSOE (37) y Podemos (27) se queda a un voto de la absoluta. En el caso de que ningún candidato obtuviese la confianza de la Cámara se convocarían elecciones autonómicas, que deberían repetirse en mayo del 2019.