El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido este lunes a los acusados por el borrado de los ordenadores de Bárcenas, la tesorera del PP, Carmen Navarro, el jefe jurídico, Alberto Durán, y el director de informática del partido, José Manuel Moreno, además de la propia formación conservadora. "Se han comportado como se comportan habitualmente la gente en una circunstancia como esta", ha señalado en un desayuno informativo.
El líder del PP ha admitido que "preferiría" que no se produjera el juicio por este asunto, pero también ha reconocido que su obligación, como presidente del Gobierno y líder del PP, es "respetar las decisiones de los tribunales", que han decidido sentarles en el banquillo por un supuesto delito de daños informáticos.
