Mariano Rajoy ha ratificado esta mañana en Guadamur (Toledo) que va a seguir "luchando" por España y "el sentido común" y que se presentará a una próxima sesión de investidura "cuando tenga los votos suficientes". Sin embargo, las cuentas siguen sin salir porque sus condiciones no han cambiado desde el 20-D. "En democracia hay que hacer caso a lo que dicen los ciudadanos", apostilló. Y tildó de "broma" que el PSOE quiera echarle y derogar todas las reformas. "Eso no va a ser", señaló.

El presidente del Gobierno en funciones no se movió ni un ápice de la postura que defiende desde las pasadas eleccciones generales por considerar que es la "más razonable y sensata". El PP, insistió, ha ganado estos comicios por lo que abogó "por respetar la voluntad de la gente". A pesar de ello, volvió a defender la coalición con el PSOEa la que podría sumarse Ciudadanos como la única salida a "este sinfín de dimes y diretes, de reuniones y de ruedas de prensa". Y agregó que su partido "no va a participar en este enredo".

Rajoy calcó los argumentos que ofreció en el debate de investidura fallida dePedro Sánchez, al que no mencionó por su nombre, y se burló de que no sepa sumar bien porque sabia que no contaba con los votos suficientes para ser elegido presidente del Gobierno. "Tenía que tener el apoyo del PP o de Podemos, con nosotros ni habló y con los otros no habló demasiado", señaló. Por ello, el acuerdo del PSOE con Ciudadanos "salió derrotado de una manera indubitada en el Congreso de los Diputados".

También ironizó sobre la petición que Sánchez ha realizado al presidente de Grecia, Alexis Tsipras, para que presione aPablo Iglesias con el fin de que desbloque la formación de un Gobierno. "Yo no le he pedido nada", matizó. Y reiteró que un Gobierno entre los socialistas, "Podemos, las mareas, IU y otros" es "malo para España". También criticó que "los líderes de los partidos no puedan hablar" y que en cambio se hayan creado comisiones "a las que se va con un programa (el acuerdo del PSOE con Ciudadanos) que ha sido derrotado".

En el acto también participó la número dos de los populares, María Dolores de Cospedal, que reprochó a los otros partidos políticos "por estar todos los días en la tele mientras que Rajoy lo que hace es estar cerca de la gente". Asimismo, criticó el acuerdo entre los socialistas y Ciudadanos para eliminar las Diputaciones Provinciales.

Defensa del acuerdo de los refugiados

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido el acuerdo alcanzado en la Unión Europea sobre los refugiados al tildarlo de "razonable y sensato". También informó de que en la noche del pasado viernes mandó el acuerdo y las aportaciones realizadas por España al mismo al resto de las fuerzas parlamentarias.

Persona muy grata

Mariano Rajoy se sintió muy querido en Guadamur donde se le hizo entrega de una placa en la que se le declaraba "persona muy grata" después de que en Pontevedra fuera declarado persona "non grata".

Asimismo, defendió su gestión de Gobierno en la última legislatura y advirtió de que "los experimentos los pagan el conjunto de los españoles". Durante su breve discurso, de apenas 20 minutos, solo realizó una referencia a Catalunyacuando explicó que el PP, el PSOE y Ciudadanos coinciden en la defensa de la unidad de España y de la soberanía nacional.