Fuentes cercanas al operativo de seguridad que siguió a Carles Puigdemont en su viaje a Finlandia confirman que al expresidente de la Generalitat se le vigiló en el trayecto de vuelta por vía electrónica, pero no solo por el método de balizar con un dispositivo electrónico el vehículo en el que viajaba. De hecho, para saber que había entrado en territorio alemán bastó con seguir el geolocalizador del teléfono móvil de uno de sus cuatro acompañantes. Durante su gira de conferencias por Finlandia, en el equipo de Puigdemont había dos móviles activos que se podían seguir, confirman las mismas fuentes. De forma oficiosa, desde la seguridad del Estado se ha filtrado que el vehículo en el que viajaba Carles Puigdemont, además, había sido balizado por los servicios de inteligencia. Pero no solo específicamente para este trayecto. De hecho, Puigdemont utilizó para su vuelta el Renault Espace con matrícula belga que usaba durante su estancia en Bélgica, que ya llevaba un chivato electrónico desde que empezara a darle servicio en Waterloo.

NUTRIDO OPERATIVO / Doce agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) habían seguido el viaje de Puigdemont a Helsinki. Una vez instalado en territorio finés, y emitida la Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por el juez Pablo Llarena, los servicios de inteligencia detectaron en Bélgica que el Espace se ponía en marcha la mañana del viernes hacia el norte, lo que hizo sospechar que Puigdemont no tomaría el avión para volver.

En el seguimiento del viaje de vuelta tomó el relevo la Comisaría General de Información de la Policía por la ruta más corta. Miembros del CNI se centraron en un trayecto alternativo, mucho más largo, que pasa por los países bálticos. El operativo policial, de una decena de agentes, estuvo en alerta toda la noche del viernes 23 al sábado 24, una vez emitida la OEDE por el magistrado de Tribunal Supremo. Fue la misma noche en la que al equipo de Puigdemont se le captaron las primeras señales que confirmaron que se había decidido por hacer más de 2.000 kilómetros por carretera.

Sobre las características del Renault Espace informó la policía española a las policías europeas tras inscribir la búsqueda de Puigdemont en el sistema Sirene de información compartida sobre buscados en Europa. Los datos del coche fueron controlados por las autoridades alemanas nada más entrar en su territorio, pero los tuvo también la policía danesa. Fuentes del entorno de Puigdemont en Bélgica tildan de «peliculero» el detalle de que el coche en el que viajaba el expresident fuera balizado con un dispositivo electrónico. Sostienen que, simplemente, el Renault Espace estaba controlado por las fuerzas de seguridad.