La enseña de España es «una bandera de todos cuyo escudo es reflejo de nuestra historia y diversidad», subrayó Felipe VI ayer en su discurso de celebración de la Pascua Militar. El Rey quiso encabezar su tradicional salutación a los tres ejércitos, la Guardia Civil y el CNI aludiendo a la bandera como representación de «nuestro deseo de seguir construyendo una sociedad libre y democrática, de acuerdo con los principios recogidos en nuestra Constitución».

La palabra «todos» también fue pronunciada con énfasis por la ministra de Defensa, Margarita Robles, que se refirió al 40º aniversario de la Constitución Española con «orgullo» por cuanto la ley de leyes supone «un marco de convivencia en el que todos tienen cabida».

Las alusiones a la Constitución, los valores democráticos y la unidad y diversidad de España fueron los ejes de las intervenciones del Jefe del Estado y de la ministra en el salón del trono del Palacio Real de Madrid, en la primera Pascua Militar que se celebra gobernando Pedro Sánchez en la Moncloa. Felipe y Letizia presidieron una ceremonia a la que, además del presidente del Gobierno, también acudió el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El Rey quiso incluir su felicitación anual a los militares en el marco simbólico del 40º aniversario de la Constitución, afirmando que cuatro décadas de democracia en España «no podrían entenderse plenamente sin reconocer la profunda identificación con la Constitución que han demostrado los integrantes de nuestras Fuerzas Armadas».

Felipe VI recordó que «el compromiso» de los militares «con los valores democráticos ha sido indispensable» para conseguir la estabilidad y la seguridad de España. Y citó el «respeto a los derechos humanos y a la dignidad de las personas, la igualdad, la justicia, la integridad personal y profesional» como «los principios y valores que se convierten en norma de vida para los militares».

El jefe del Estado hizo mención también a «la abnegación» de las Fuerzas Armadas en la «defensa de la seguridad y libertad de todos los españoles y de sus instituciones democráticas», al recordar a las víctimas del terrorismo, ante el cual «a los españoles nunca nos venció el desánimo».

Los discursos solemnes del Rey y la titular de Defensa inauguraron el año castrense. La ministra subrayó la necesidad de «mantener la labor de las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil alejadas de decisiones partidistas o coyunturales», pues los ejércitos «son principales garantes del ordenamiento constitucional».

Robles hizo tres anuncios: que en marzo Rota se convertirá en la principal base naval de mando de la operación Atalanta contra la piratería en el Índico; que su departamento prepara «un plan de conciencia y cultura de Defensa» para la sociedad; y que trabaja en «un plan de choque en bases y acuartelamientos».