Casi en tiempo de descuento para que se acabe la legislatura, Albert Rivera se ha descolgado este jueves con una nueva propuesta para intentar desbloquear la situación. Dado que el PP no quiere un gobierno de Pedro Sánchez y los socialistas abominan de Mariano Rajoy, el líder de Ciudadanos ha propuesto que se aparten los líderes, incluido él, para buscar un acuerdo 'in extremis' entre los dos partidos mayoritarios y la fuerza naranja que evite la repetición electoral.

"Si los líderes somos el problema, demos un paso atrás. Me pongo el primero", ha reflexionado en una entrevista en Tele 5, en la que ha denunciado que "es evidente que hay líderes que están poniendo por encima los intereses de su partido que los de España" y que "el problema es de personalismos y por asuntos de liderazgo interno en los partidos, más que de contenidos".

Por todo ello, ha pedido un gobierno "de consenso" sin ninguno de los tres dirigentes y capitaneado por "un independiente". Una idea similar a la que llevan proponiendo algunas semanas algunos políticos como Esperanza Aguirre, sin éxito ninguno, dado que ni Sánchez ni Rajoy están dispuestos a echarse a un lado.

EJECUTIVO CON MINISTROS "DE CONSENSO"

Rivera ha aclarado que propone un Ejecutivo "menos partidista y con figuras de consenso, que sea capaz de echar adelante reformas". En su opinión, aún queda tiempo de alcanzar un pacto si Sánchez y Rajoy autorizan a los equipos de negociación a sentarse "a hablar de reformas". Sería un Gobierno "de transición" que podría afrontar una reforma de la Constitución y después, siguiendo su propio proceso de reforma, disolver las Cortes y volver a convocar las elecciones", ha aclarado. "Todos los partidos tenemos que pensar más en España que en nosotros mismos y desbloquear esta situación", ha reclamado.

En cuanto a la posibilidad de un acuerdo a última hora entre el PSOE y Podemos, Rivera ha considerado que "es cierto que ambos partidos pueden sumar" pero ha aseverado que le "cuesta creer" que los socialistas "quieran formar gobierno con separatistas", en referencia a la necesidad de la abstención de partidos como ERC y CDC.