Ahora que otros grupos aprueban resoluciones en las que se comprometen a no pactar con determinados partidos después de las elecciones generales del próximo 28 de abril, como hizo este lunes Ciudadanos al vetar al PSOE, Pedro Sánchez exhibe su capacidad de acuerdo ante unos comicios donde ningún candidato tendrá mayoría absoluta. El líder socialista busca trasladar una imagen de dirigente moderado, alguien que con su Gobierno ha representado "lo mejor de la sociedad española" y que es capaz de "unir al país".

"Cuando un partido dice que no va a pactar con otro, lo que está haciendo es tener una visión excluyente de nuestro sistema democrático. El 28 de abril tiene que servir para unir a los españoles. Lo importante no es decir con quién pactar, sino cuál es tu proyecto", dijo Sánchez en TVE, durante su primera entrevista después del adelanto electoral anunciado el pasado viernes.

El jefe del Ejecutivo, al que todas las encuestas colocan en primera posición, no excluyó ninguna posible alianza, más allá del sobreentendido rechazo a Vox, ni cerró la puerta a ser investido con los votos de los partidos independentistas, que primero apoyaron la moción de censura a Mariano Rajoy y después han provocado el adelanto de los comicios con su voto en contra de los Presupuestos. "Lo que necesita el país es unirse. Yo defiendo la unidad de España, pero defender la unidad de España es unir a los españoles, no dividirlos", señaló.

Frente a esta actitud, están el PP y Cs, argumentó el presidente, que "quieren un 155 permanente, porque quieren enquistar el problema político en Cataluña". Pero también ERC y el PDECat. A su juicio, ambos partidos "tienen pavor a sentarse a dialogar, a decirles a los elementos más radicales de la población catalana que les han mentido".

Borrell, a la Eurocámara

Sánchez ya tiene una idea bastante clara de las listas electorales para las generales, que el PSOE aprobará el 17 de marzo. La renovación será profunda en el grupo parlamentario en el Congreso, donde la mayoría de sus 84 diputados actuales se posicionó junto a Susana Díaz en las primarias de hace dos años. El presidente busca un equipo "alineado con la tarea del Gobierno", dijo en la entrevista. Allí tendrán un papel sus ministros, varios de ellos independientes, a quienes Sánchez ha pedido, según fuentes socialistas, que ocupen puestos en las candidaturas. La acogida ha sido en general buena, explican en la dirección del PSOE, con alguna excepción, como la del titular de Ciencia, Pedro Duque.

Quien no estará en las listas a las generales, salvo sorpresa, será Josep Borrell, ministro de Exteriores. Sánchez le ha confiado un rol distinto: ser el candidato en las elecciones europeas de mayo. Borrell todavía no ha aceptado, pero en el PSOE se da por hecho que lo hará en breve. "Depende de su disposición", admitió el secretario de Organización y titular de Fomento, José Luis Ábalos, tras la Ejecutiva socialista.