La última reunión que mantuvieron Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, el pasado lunes en la Moncloa, no fue bien. El presidente del Gobierno le trasladó al líder de Podemos que solo contemplaba la incorporación de miembros del partido morado en puestos intermedios, en ningún caso en el Consejo de Ministros. Para Iglesias, que mira más alto y quiere hacer valer sus 42 diputados, no es suficiente. Sus posiciones están ahora mismo muy lejos de encontrarse, pero Sánchez es optimista: cree que al final, Podemos asumirá que no puede ir más allá y pactará con el PSOE.

"Podemos es nuestro socio prioritario. Les hemos trasladado cómo definimos nosotros el Gobierno de cooperación y esperamos contar con su apoyo", ha dicho este jueves el jefe del Ejecutivo en Bruselas, justo antes de empezar el Consejo Europeo en el que se abordará el reparto de las principales instituciones comunitarias.

Sánchez evita extremar el tono con los morados. Al menos, en público. No le conviene lastimar a Podemos, en claro declive ante las urnas, porque sigue necesitando al partido de Iglesias. A la derecha del PSOE, no hay ningún pacto de investidura posible con el PP y Cs. Los socialistas intentan ser conciliadores en sus declaraciones, en busca de una investidura que siguen contemplando que se celebre a mediados de julio.

LOS "PARTIDOS DE ESTADO"

Aun así, el presidente no abandona su apelación al PP y a Cs para que se abstengan, un paso que, de producirse, haría innecesario el apoyo de los morados. En el PSOE dan por hecho que Pablo Casado y Albert Rivera votarán en contra, como ambos han subrayado también este jueves en Bruselas, pero continúan reclamando "responsabilidad" a ambos dirigentes para, entre otras cosas, hurgar en sus contradicciones y construir un relato en el que Sánchez no ha tenido más remedio que acudir a los grupos minoritarios para que "España tenga un Gobierno cuanto antes".

"Queremos entendernos con todos, dialogar con todos dentro de la Constitución. Somos un gobierno de izquierdas, y queremos entendernos sobre todo con las fuerzas que están a la izquierda del PSOE, pero tenemos una agenda de reformas abierta a otras fuerzas políticas. Desgraciadamente, algunas siguen poniendo un cordón sanitario al PSOE", ha señalado Sánchez. "Ahora mismo la única alternativa, porque así lo han querido los españoles y porque el PSOE dobla en escaños a la segunda fuerza, es un gobierno del PSOE. Es importante trasladar al PP y a Cs su responsabilidad. ¿Qué proponen? ¿El bloqueo, unas nuevas elecciones? Como partidos de Estado que dicen ser, su responsabilidad es no bloquear", ha argumentado el presidente.