Tras una semana de tempestad entre el PSOE y Unidas Podemos por la actitud respecto a Ciudadanos, ya hay una posición compartida: los dos socios asumen que habrá que redactar unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) "progresistas", por descontado, pero "no excluyentes", que no ahuyenten a la formación de Inés Arrimadas. A cambio, Pedro Sánchez demanda que los "interlocutores" a los que se dirija el Ejecutivo han de ser conscientes de que negocian con dos formaciones, con una coalición, y no solo con los socialistas.

Los cimientos de la negociación presupuestaria, que arranca ahora, están ya a la vista, y el presidente dejó verlos este martes durante una entrevista a primera hora en 'Hoy por hoy', en la cadena SER. Primera entrevista del curso político en la que lanzó también un aviso a la popular Isabel Díaz Ayuso, la presidenta madrileña: al Gobierno central le "preocupa" la evolución de la pandemia de coronavirus en Madrid. Hasta ahí llega el mensaje, sin anticipar si el Ejecutivo, llegado el caso y si la situación epidemiológica se desborda, tomará las riendas.

Los Presupuestos de 2021 centrarán este trimestre político y la parte socialista es relativamente optimista, y cree que puede sacarlos adelante con el apoyo del PNV y de Cs. Los morados, el pasado viernes, volvieron a declararse "incompatibles" con los naranjas, aunque horas más tarde, y ante la palpable sorpresa e incomodidad del PSOE, suavizaron su postura y se limitaron a exigir que el borrador de PGE que se ofreciera a los grupos fuera primero pactado en el seno del Ejecutivo. Este lunes, en una reunión entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, ambos pactaron eso mismo, que el texto fuera acordado por la coalición, y de hecho a primera hora de este 1 de septiembre la Moncloa anunció que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el secretario de Estado de Derechos Sociales y mano derecha de Iglesias en materia económica, Nacho Álvarez, despacharán esta tarde a las 18:00 "para iniciar los trabajos de preparación" de las cuentas de 2021.

Las aguas retornaron a su cauce y ello permitió a Sánchez afirmar primero en la SER que "no ha habido veto" a Ciudadanos. El presidente recordó que los PGE son el "principal instrumento" de cualquier Gobierno para hacer frente a la emergencia económica y social, y más en un contexto como el actual, en el que no sirven las cuentas de 2018, las últimas aprobadas y redactadas por Cristóbal Montoro, porque no contienen "los instrumentos necesarios" para vehicular las ayudas europeas que llegarán a España a partir de 2021.

Partiendo de esa base, razonó, de la constatación de que los PGE de 2018 "no son capaces de absorber" los recursos económicos que llegarán de Bruselas, y que es "imprescindible" disponer de unos nuevos, se elaborarán unos Presupuestos que "reafirmen" muchos de los compromisos incorporados al acuerdo de gobierno de PSOE y Unidas Podemos. Especialmente en cuatro líneas de actuación, enunciadas ayer lunes por el presidente en su conferencia de arranque del curso político: transición ecológica, transformación digital, cohesión social y territorial y agenda feminista. Pero los PGE, reiteró, deben ser "de país", y han de "mirar más allá" de la mayoría parlamentaria que sustenta al Ejecutivo.