Lo primero que ha dicho Pedro Sánchez este jueves durante sus breves declaraciones en Bruselas, a donde ha viajado para participar en la cumbre socialdemócrata previa al Consejo Europeo sobre refugiados, ha sido esto: “Yo podría ser hoy presidente del Gobierno”. El líder socialista coincidirá en la capital belga con el primer ministro griego, Alexis Tsipras, a quien Pablo Iglesiassuele poner de ejemplo, y ha utilizado este hecho para continuar presionando a Podemos para que se sume al pacto entre el PSOE y Ciudadanos.

“Doy la bienvenida a Tsipras a la familia socialista europea. Pero le recuerdo que Iglesias está bloqueando la formación de un Gobierno progresista en España. Le voy a pedir a Tsipras que le diga a Iglesias que su actitud de bloqueo está perjudicando a millones de españoles y solo beneficia a Rajoy y el PP”, ha señalado Sánchez, que el pasado miércoles conversó durante 15 minutos por teléfono con el secretario general de Podemos. Ambos dirigentes han quedado en reunirse antes de Semana Santa, pero la crisis interna en el partido morado, cuyo episodio central ha sido el fulminante cese de su hasta ahora secretario de organización, Sergio Pascual, hace que el PSOE sea muy pesimista sobre las posibilidades de entendimiento. “Nos preocupa que el sector más propenso al acuerdo esté siendo fulminado por el más inmovilista”, argumentan fuentes de la dirección socialista, que consideran al número dos de Podemos, Íñigo Errejón, muy cercano a Pascual, más proclive al pacto que Iglesias.

LA AUSENCIA DE MORENÉS

Tres días atrás, un importante dirigente de Podemos se mostraba sorprendido de que la única vía utilizada por Sánchez para intentar atraerles al pacto, a su juicio, fuese “la presión”. La estrategia se ha mantenido, incluso redoblado, este jueves. Sánchez ha aprovechado lacontrovertida ausencia en el Congreso del ministro de Defensa, Pedro Morenés, para responsabilizar a Iglesias. Morenés estaba citado ante la comisión de su área para informar sobre laúltima reunión de la OTAN y la operación contra las mafias que trafican con refugiados, pero el Ejecutivo del PP considera que al estar en funciones no debe ser controlado por el Parlamento.

Todos los grupos han cargado contra el ministro, también Iglesias, a quien Sánchez ha culpado de que se produzcan hechos como este. “Es responsabilidad del Gobierno en funciones, sí, pero no solamente. Insto a Iglesias a que desbloqueé esta situación. Laresponsabilidad también es de aquellos que con su bloqueocontribuyen a que España no tenga un Gobierno con plenas capacidades, que es lo que estamos pidiendo el PSOE y Ciudadanos”, ha dicho el secretario general socialista.