No se atreven a dar números pero, sea por estrategia o por datos (que no quieren facilitar), los principales asesores de Soraya Sáenz de Santamaría aseguran que ella puede ganar a Pablo Casado "con más que claridad". Fuentes de la candidatura de la exvicepresidenta han contado a la prensa que desde el jueves han contactado con compromisarios que a priori apoyaban a María Dolores de Cospedal, que no pasó a la segunda vuelta, y les han ofrecido su apoyo. "En este partido la percepción con nuestras conversaciones es que la cosa va muy bien. Detectamos una tendencia muy positiva en favor de nuestra candidatura", ha dicho uno de los principales colaboradores de Santamaría que también ha denunciado la "enorme falta de experiencia" de Casado al ver cómo el aspirante está afrontando "esta segunda fase".

Casado ha vuelto a rechazar este lunes la candidatura de unidad que le ofrece su contrincante y califica de "conjura palaciega" la posibilidad de sentarse a integrar los dos equipos y repartirse los cargos. Santamaría le tiende la mano y le ha propuesto una reunión a él y también a Cospedal, para hablar del futuro. Los asesores de la vencedora quitan importancia a la diferencia ideológica con Casado, que ha defendido posiciones duras durante la campaña contra el aborto y contra el diálogo con los independentistas. "Este partido es amplio. Puede caber todo el mundo (...) Además, yo no he oído nunca a Casado quejarse de la 'operación diálogo' antes del 155 (...) Ni tampoco le escuché que no estaba de acuerdo con la estrategia del PP de esperar a la sentencia del Tribunal Constitucional en el tema del aborto", ha avisado un portavoz de Santamaría, que ha añadido: "Ojo con quejarse de la historia del partido y del Gobierno".

Debate sí, pero...

Casado quiere un "debate ideológico" con Santamaría, algo a lo que ella está de acuerdo, pero con la boca pequeña. En privado, los asesores de la ganadora creen que un acto así subrayaría "las distancias" y consideran que "es más rentable hablar con los compromisarios y convencerles del PP que se quiere hacer". Un portavoz de la exvicepresidenta ha comentado que ella "ha debatido con muchísima más gente" y "más difícil" que Casado y que, si la Comisión Organizadora del Congreso (COC) acaba proponiendo un cara a cara, la preocupación de Santamaría "es cercana a cero".

En principio, la COC debía analizar la petición oficial de debate que ha planteado el diputado por escrito, pero al final no lo ha hecho. El coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo, que en principio debería mantener la neutralidad porque es el principal responsable en la sede de Génova, ha afirmado que no lo ve "necesario".