Los tres grupos independentistas evitaron ayer que el president de la Generalitat, Quim Torra, tenga que acudir al pleno para aclarar si tiene o no vinculación con los nueve CDR acusados de terrorismo. Los diputados votaron hasta cuatro peticiones de comparecencia (Cs, PPC, PSC y Catalunya En Comú - Podem) pero JxCat, ERC y la CUP sumaron más votos en contra. Socialistas y comunes unieron fuerzas en sus propuestas pero no sumaron.

Ernest Maragall, de ERC, insistió en que esta petición de comparecencia «es un paso más en la operación de acoso y derribo contra las instituciones y el independentismo como proyecto político». «Lo de hoy es la más explícita prostitución de la degradación parlamentaria», espetó, y se mostró especialmente molesto con los comuns por una postura que ha tachado de «especialmente decepcionante». «Esto es un intento vergonzoso de criminalizar al president», zanjó.

En la misma línea se expresó el portavoz de JxCat, Eduard Pujol, que vindicó a Torra como un presidente «íntegro». La CUP se solidarizó con los CDR arrestados y denunció que algunos se encuentren en régimen de aislamiento.

La jefa de la oposición y líder de Cs, Lorena Roldán, tiró del sumario para insistir en que el Parlament lleva «dos intentos de asalto en un año» mientras el Govern «no hace absolutamente nada». «Eso se llama totalitarismo», denunció, y criticó que se vete una comparecencia para saber si el plan de los CDR para «atrincherarse» en la Cámara catalana recibía su complicidad. También el diputado popular, Santi Rodríguez, señaló al president por «alimenta el conflicto»: «Dice que son gente comprometida y a esta gente comprometida yo los quiero en prisión».

En un tono mucho menos beligerante, el diputado del PSC Ferran Pedret pidió al independentismo que salga a desmarcarse de los detenidos. «En un movimiento tan amplio puede ser que haya gente que opte por un modelo no democrático», expresó, pero dijo que «ante la gravedad de las vinculaciones que presuntamente existirían con gente que estaba preparando explosivos lo mínimo que se puede hacer es que comparezca el president». «sí se merece una explicación política sobre estas graves conclusiones a la que se puede llegar leyendo el sumario», remachó.