El próximo jueves se celebra la vista del recurso de apelación interpuesto por los abogados de Oriol Junqueras contra el auto del juez del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena del 4 diciembre pasado, que acordó mantener el ingreso en prisión provisional incondicional del vicepresidente del Govern cesado. Fuentes de la Sala Segunda consideran «altamente improbable» que se revoque o modifique esa decisión, y subrayan que hay escasos precedentes de revocación en casos de apelaciones contra medidas cautelares. La Sala de apelación está integrada por Alberto Jorge Barreiro, un magistrado progresista perteneciente a Jueces para la Democracia; Miguel Colmenero, que la presidirá, ponente en su día de la sentencia del 11-M y que en la actualidad redacta la del recurso contra el fallo de la Audiencia Nacional sobre las tarjetas black, y Francisco Monterde Ferrer, que fue vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y líder de la Asociación Profesional de la Magistratura.

La Sala de apelación ha accedido excepcionalmente y previa solicitud de la representación del imputado a que en la vista de la apelación comparezca Junqueras, que estará así presente cuando sus letrados y el ministerio fiscal formulen sus alegaciones. No se descarta que el presidente de la Sala pueda preguntar al investigado si desea añadir algún argumento a los expuestos por sus abogados.

La Sala quiere ser extraordinariamente escrupulosa para que no haya fisuras procesales que puedan ser aducidas como infracciones al derecho de defensa ante la justicia europea. En todo caso, no se trata de una nueva comparecencia del imputado, sino de una vista para que sus letrados rebatan los argumentos de Llarena -especialmente el riesgo de reiteración delictiva que aquel consideró verosímil para mantenerle en prisión- y lograr una revocación de la medida.

Los amgistrados con conscientes de las consecuencias políticas que esta situación conlleva, pero creen que «son ajenas a la estricta función jurisdiccional».

Así las cosas, Junqueras no estaría presente en el proceso de constitución de la Mesa del Parlament y trámites posteriores, aunque los precedentes judiciales abonan su presencia en un eventual debate de investidura.