Una acción sorpresa en un lugar «estratégico» de Madrid sería tan buen «escaparate» para Tsunami Democràtic como lo fue el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, o el corte de La Junquera. Los servicios de Información del Ministerio del Interior confirmaron a este diario que el movimiento independentista tiene «sobre la mesa» y se plantea la posibilidad de actuar en la capital de España. Consideran «un escenario improbable, pero no imposible» que lo haga en los próximos días.

«Tendrían que desplazarse durante varias horas y, para evitar filtraciones, deberían coordinarse solo a través de su app para móviles, que todavía no funciona demasiado bien», explican estas fuentes, que añaden que, si Tsunami decide finalmente actuar en Madrid, intentaría que fuera «algo espectacular y algo muy específico». «No parece probable que se conformen con intentar una acampada en un lugar como la Plaza Mayor, al estilo del 15-M, eso no duraría mucho».

Las fuentes consultadas creen que un objetivo de Tsunami en Madrid puede ser el Congreso de los Diputados, por su localización y su repercusión. El Parlament ya fue objetivo de acciones y posibilidades de intervención por parte de diferentes grupos independentistas. En cuanto al Congreso, ya hubo años atrás manifestaciones de indignados a las puertas. Si el Tsunami lograra acercarse al Congreso, habría «cargas policiales y fotos de turistas... La repercusión internacional podría ser mayor que la de El Prat», subraya un analista.

El 14 de octubre, tras la difusión de la sentencia del procés, y casi al tiempo que iniciaba la ocupación del aeropuerto de El Prat, Tsunami difundió un comunicado en el que anunciaba que «miles de vehículos» iban a marcha lenta para colapsar el aeropuerto de Barajas. Lo acompañaba de imágenes de atascos. Era una fake, un bulo, desinformación que, aquel día, buscaba «distraer», según fuentes policiales.

«Estamos viendo que la estrategia de Tsunami va a ser, siempre que puedan, una acción cada día. Hit and run. Golpear y correr. Cuando ven que están siendo superados, anuncian que se retiran. Luego, empiezan otra en otro lugar. Buscan el multifoco, dar guerra, provocar el cansancio y el desánimo entre policías. Y también llamar la atención», explican fuentes de los servicios de información.

La batalla contra Tsunami no es sencilla y es desigual. Tienen más de 400.000 personas en su canal de Telegram.