Iñaki Urdangarin ha desvinculado en su tercer y último día de declaración al rey emérito de sus negocios. "Don Juan Carlos nunca intercedió en mis negocios ni en los de mi mujer", ha asegurado. El expresidente de Nóos ha alejado este jueves tanto a su suegro como a su esposa, la infanta Cristina, de cualquier actividad presuntamente irregular vinculada con el entramado empresarial que dirigía junto con Diego Torres.

La magistrada Romero ha interrumpido el interrogatorio de la abogada de Manos Limpias, Virginia López Negrete, ante la exhibición de un correo electrónico entre el acusado y Juan Carlos. Tras la deliberación del tribunal, la jueza ha anunciado que se trataba de una prueba "inadmitida", y ha avisado que "si se vuelve a producir un error similar, tendremos que advertir mala fe procesal".

Negrete había empezado su interrogatorio a Iñaki Urdangarin con el objetivo de implicar la infanta Cristina en la supuesta actividad irregular de Aizoon, la empresa que compartía el matrimonio. En esta línea, la letrada ha empezado con fuerza y se ha centrado rápidamente en los gastos que ella considera "personales" incluidos en las cuentas de Aizoon.

Urdangarin ha admitido que había dos tarjetas visa de la empresa, una para él y otra bajo el nombre de su esposa. Sin embargo, ha asegurado que la infanta Cristina nunca "utilizó personalmente" y que no tenía las claves de la tarjeta.

Según el acusado, era él mismo quien custodiaba la tarjeta, que también utilizaban "algunas personas de nuestro entorno, como mi secretaria". La letrada del sindicato Manos Limpias ha nombrado varias facturas deducidas a Aizoon, correspondientes a supermercados, farmacias, El Corte Inglés, Mango, Decathlon, la peluquería Llongueras... El cuñado del Rey se ha justificado y ha dicho que presentaba "todos mis 'tickets' a mi secretaria y mis asesores, que eran quienes decidían si el gasto iba a Aizoon o no".

Como Diego Torres, ha reiterado la confianza que tenía en sus asesores y ha concedido: "Estoy dispuesto a arreglar mi error administrativo por haber sido mal asesorado o haber tomado malas decisiones".

A pesar de ser el objetivo de las preguntas de Manos Limpias, Urdangarin ha defendido en todo momento a su esposa. "Con cuatro hijos pequeños, no teníamos mucho tiempo e intentábamos hablar de cosas que no fueran trabajo", ha asegurado. El acusado se ha atribuido la gestión de la economía familiar y ha negado comunicar a la infanta de todos sus pasos profesionales. "Solo la informaba en ocasiones excepcionales, sin detalles", ha dicho.

Urdangarin también ha confirmado que "Cristina recibió dos aportaciones económicas de 600.000 euros por parte de su padre". En total, 1,2 millones de euros, que el acusado ha explicado que iban destinados a la compra de su vivienda de Barcelona.

LAS SOCIEDADES DE TORRES

Este jueves también ha prestado declaración Salvador Trinxet, que presuntamente ayudó a urdir una red de evasión fiscal internacional de los ingresos obtenidos de forma irregular por el Instituto Nóos. Este abogado ha señalado que el exsecretario del Instituto Nóos Miguel Tejeiro se puso en contacto con él en 2006 para comentarle que un cliente suyo, en referencia a Diego Torres, estaba interesado en la compra de tres sociedades, una en Belice y dos en Reino Unido, para desarrollar actividades académicas de consultoría y deportivas a nivel internacional.

Trinxet ha recordado que Tejeiro le dijo que Torres era su cuñado y que eso era "garantía de que el tema era serio". Asimismo, ha apuntado que al exsocio de Iñaki Urdangarin le conoció en 2002. El acusado ha precisado asimismo que cobró 12.000 euros del Bufete Medina Tejeiro por esta gestión, que incluía la búsqueda de las sociedades y su mantenimiento durante dos años.