Urkullu insta al Estado a reconocer que «el problema» es «político»

El lendakari, Íñigo Urkullu, afirmó ayer que el resultado de las elecciones al Parlament del 21-D refleja la necesidad de que el Estado español reconozca que existe «un problema político» en Cataluña que necesita soluciones políticas y no judiciales. Así se manifestó el presidente del Gobierno vasco a las puertas del Parlamento vasco tras aprobarse los Presupuestos de Euskadi para el 2018 gracias al acuerdo que, por segundo año consecutivo, han alcanzado el PNV, el PSE-EE y el PP. EH Bildu y Elkarrekin Podemos votaron en contra.

El lendakari aseguró que la «altísima» participación registrada ratifica una «realidad» que se viene repitiendo en tres elecciones consecutivas desde el 2012. Y apeló al «realismo» y a reconocer que existen sentimientos de identidad y de pertenencia diversos en Cataluña, y que es necesario dialogar. Por ello, consideró necesario «un ejercicio de voluntad de acuerdo», también «en la propia Cataluña», basado en «el diálogo».

Urkullu rechazó pronunciarse sobre si el presidente de la Generalitat cesado, Carles Puigdemont, está «legitimado» para volver a presidir el Govern, y afirmó que «a partir de ahora cada uno tiene que hacer su interpretación y su lectura de lo que ha sido el pasado y de lo que tiene que ser en el futuro el ejercicio de la política en Cataluña y en el conjunto del Estado para solucionar los problemas de la sociedad». Asimismo, señaló que lo ocurrido en las elecciones evidencia que «es necesario hacer un reconocimiento de la bilateralidad».