Los Reyes inician este fin de semana junto a sus hijas su tradicional estancia veraniega en Palma de Mallorca, un periodo que va a ser atípico por las consecuencias de la pandemia de coronavirus y por las repercusiones de la salida de España de Juan Carlos I. Está previsto que entre hoy y el sábado ya estén en el palacio de Marivent con sus hijas, la princesa de Asturias y la infanta Sofía.
En la capital balear, los Reyes se reunirán con la Reina emérita Sofía, a quien el miércoles pasado se la vio por primera vez en las calles de la ciudad. Sofía, que seguirá residiendo en Zarzuela y mantendrá sus actividades institucionales, llegó días atrás a Palma acompañada de su hermana, Irene de Grecia, y de la infanta Elena. La estancia de los Reyes en Palma se prolongará hasta el 17 de agosto y no se prevé que la actividad oficial comience hasta el lunes 10. El próximo miércoles, Felipe VI recibirá en la tradicional audiencia veraniega al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez para tratar diversos asuntos de actualidad política e institucional.
La pandemia del covid-19 ha obligado a suspender la edición de este año de la Copa del Rey de Vela, que se celebra tradicionalmente desde finales de julio en aguas de la bahía de Palma y a la que siempre acudía Felipe. Además, las medidas sanitarias ante el coronavirus han llevado a la Casa Real a suspender la recepción tradicional a la sociedad balear en el Palacio de la Almudaina y es previsible que no haya o se modifique el formato del habitual posado que protagonizaban todos los años los reyes y sus hijas. Felipe y Letizia van a incluir este año un recorrido por otras islas de la comunidad, además de Mallorca, para contactar con diversos sectores sociales y conocer directamente cómo les está afectando la pandemia. H
