Solo falta una semana para elegir al sucesor de Mariano Rajoy. Ese es el tiempo real. El tiempo psicológico es otra cosa y todo apunta a que a los populares, poco acostumbrados a las luchas internas, se les va a hacer largo. Desde ayer por la mañana corre de móvil en móvil de los conservadores un vídeo contra Soraya Sáenz de Santamaría que trata de desmontar la imagen de «renovación» que ella, al igual que Pablo Casado, se arroga. La cinta, titulada Cuéntanos cómo vais a renovarnos y editada con la música de la serie, subraya que la exvicepresidenta se ha rodeado de pesos pesados con mucha historia a sus espaldas como Javier Arenas, Celia Villalobos y Cristóbal Montoro. Del primero, que ha sido clave para la victoria de Santamaría en Andalucía, señala que empezó en 1979 con la UCD y recuerda su «fracaso» para presidir la Junta.

De Villalobos, diputada en 1986 con Alianza Popular, se destacan algunas polémicas, como cuando defendió hacer caldo con huesos de cerdo (en el 2000, por la crisis de las vacas locas) y cuando se le pilló jugando al Candy Crash en el Congreso, hace tres años. Además, estos días en la candidatura de Casado, frente a la campaña que de manera abierta ha hecho Villalobos, se hablaba de la más discreta de su marido, Pedro Arriola, oráculo demoscópico de Rajoy y que ahora, según esas fuentes, ha apoyado a la exnúmero dos de la Moncloa.

El vídeo también se detiene en Cristóbal Montoro, que comenzó en 1993 como diputado, y ya como ministro de Hacienda, con Rajoy, defendió subidas de impuestos. La candidatura de Casado envió un comunicado para desmarcarse de la cinta y condenó «enérgicamente cualquier acción que suponga un ataque a cualquier compañero del PP».

Renovar la formación conservadora será una obligación del nuevo líder y tanto Santamaría como Casado aseguran ser los mejores para hacerlo. Fuentes del equipo de la exvicepresidenta recuerdan que ya María Dolores de Cospedal señaló en la primera vuelta que el vicesecretario es el candidato de José María Aznar. Preguntada por el vídeo, aconsejó a Casado que aprenda a «controlar la ansiedad».

Ayer también se avanzó en los preparativos del congreso, el 19º de la formación. El lema será El futuro de España y no va junto con el logo de la tradicional gaviota. Los conservadores vuelven a usar la encina, como en la convención de Sevilla.

En el cónclave, que se celebrará en Madrid, 3.082 compromisarios votarán el día 21 al sucesor de Rajoy. Y lo harán en unas condiciones inéditas para los populares: meterán la papeleta en un sobre y dispondrán de cabinas para garantizar que el sufragio es secreto. Son condiciones que Casado reclamó. A Santamaría no le parecían imprescindibles, pero la comisión ha aceptado las sugerencias del diputado.