La Mesa del Congreso de los Diputados aprobó ayer la distribución de los escaños que ocupará cada partido durante la legislatura que está arrancando. Y como viene siendo habitual, el reparto de sillones trajo aparejada la polémica. Los resultados de las elecciones del 10-N han conllevado dos cambios importantes en la configuración del hemiciclo: Vox ocupará tres asientos en primera fila, detrás de la bancada del Gobierno, con acceso directo al pasillo -uno de los puestos más deseados- y Cs, tras caer de 57 a 10 diputados, quedará relegado a la tercera fila, perdiendo la posición privilegiada que había logrado tras los comicios de abril.

Los 52 diputados de extrema derecha, sitúan a Santiago Abascal como el líder de la tercera fuerza política en el Congreso, y, como tal, ocupará el escaño que hasta apenas unos meses le pertenecía al expresidente de Cs, Albert Rivera.

Sin embargo, la Mesa del Congreso decidió mandar a la mayoría de los parlamentarios ultraderechistas a las últimas filas, al odiado gallinero -la parte más alta y menos visible del anfiteatro-, dejando al presidente de Vox desarropado. Algo que el portavoz parlamentario del partido, Iván Espinosa de los Monteros, tachó de «cacicada» contra su formación para «diluir» a Vox esparciendo a sus representantes por el hemiciclo.

En mitad del espacio que correspondía a Vox, la Mesa reservó una pequeña isla naranja para los 10 de Cs. Inés Arrimadas ocupará un asiento en la tercera fila y, salvando el pasillo, tendrá de vecinos en la grada central a los 13 diputados de ERC. Una disposición que promete bastantes momentos intensos.

Respetando la tradición, PP y PSOE mantienen sus espacios habituales -los socialistas en el ala izquierda de la Cámara y los conservadores ocupando la grada de la derecha-. A continuación de los socialistas, en el quesito central, estarán los 32 parlamentarios de Unidas Podemos. Los grupos han acordado una reforma del hemiciclo para que el dirigente morado, Pablo Echenique, no tenga que estar arriba del todo, donde están los únicos escaños accesibles en silla de ruedas. Completando este arco estarán también los representantes del PNV -tres tras los sillones reservados a los ministros y otros tres en segunda fila-.

En el gallinero, EH Bildu, por primera vez con grupo propio, ocupará la penúltima fila por encima de los morados y junto a los 5 miembros del actual grupo mixto -CUP (2), Navarra Suma (2) y Foro (1)-. Más arriba estarán los 16 diputados del grupo parlamentario Plural -JxCat, Más País, Compromís, CC, NC, BNG, PRC y Teruel Existe-, cuya constitución aprobó ayer la Mesa.