El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, aseguró ayer que la partida para la equiparación salarial de policías nacionales y guardias civiles se incluirá en los Presupuestos Generales del Estado, pero si estos no se aprueban, siempre habrá «una herramienta» para cumplir ese compromiso. Zoido hizo estas afirmaciones en Onda Cero horas después de alcanzarse un preacuerdo «histórico», según Interior, entre la Secretaría de Estado de Seguridad y los sindicatos policiales y las asociaciones de guardias civiles. Un preacuerdo que será sometido a votación de los más de 140.000 agentes que componen ambos cuerpos y que supone una oferta de 1.100 millones en tres años, de los que ya 500 se incluirían en las cuentas de el presente ejercicio.

«En principio -insistió Zoido- queremos llevar el acuerdo a los presupuestos, que estamos cerrando», pero si estos no salen adelante «siempre habría una herramienta que nos permitiera cumplir este compromiso de justicia».

Para el titular de Interior, este preacuerdo es el final del conflicto, pero sobre todo, con él se hace justicia en una reivindicación de hace 20 años y se reconoce «a quienes velan todos los días por la seguridad y los derechos de los ciudadanos». Y dejó claro que en el 2020 un policía y un guardia civil cobrarán exactamente lo mismo que un mosso, porque el preacuerdo garantiza la «equiparación cuerpo a cuerpo» después de que se haya hecho un trabajo «muy minucioso, de muchas horas y noches», ya que ha habido que analizar puestos distintos, sueldos distintos y categorías distintas «difícilmente comparables».

Zoido explicó que el preacuerdo establece la revisión permanente de la equiparación, de tal manera que «si hay cualquier desvío en una categoría, se corrige inmediatamente». Además, se aprobará una ley que impedirá la desigualdad en lo sucesivo, añadió antes de agradecer a sindicatos y asociaciones su trabajo, así como a otros departamentos del Gobierno y, sobre todo, al Ministerio de Hacienda.