La empresa castellonense Codiagro, líder en fisionutrición vegetal, cumplirá pronto sus primeros 40 años de existencia. Durante las últimas cuatro décadas, la firma se ha posicionado como referente en su sector gracias a su decidida apuesta por el I+D+i.

La inversión en innovación de la compañía se ha trasladado a su cartera de productos y patentes propias relacionadas con el uso de los ácidos dicarboxílicos de bajo peso molecular y su aplicación, mediante diferentes modificaciones químicas, en fertilizantes y bioestimulantes.

La nutrición carboxílica es la tecnología natural más avanzada en bioestimulación vegetal para lograr que las plantas puedan acercarse a su verdadero potencial genético. Actualmente, Codiagro exporta esta tecnología a más de 35 países de todo el mundo, destinos donde los agricultores se benefician de las elevadas prestaciones de los ácidos dicarboxílicos. Entre ellas, cabe reseñar las siguientes:

1. Son buenos agentes complejantes, lo que facilita la estabilidad y disponibilidad de otros componentes fertilizantes.

2. Son transportadores o carrier dentro de la propia planta: transportan los cationes minerales hacia el centro activo.

3. No son ajenos a la propia fisiología vegetal e intervienen en importantes procesos biológicos.

4. Reducen los costes energéticos de los procesos de floración, cuaje, maduración y engorde.

5. Mejoran la post-cosecha al producir un efecto elicitor en las autodefensas frente a enfermedades.

6. Y, por último, aumentan la tolerancia natural del cultivo al estrés abiótico relacionando con el cambio climático.

RESPONSABILIDAD SOCIAL

Junto a su apuesta por la calidad y el I+D, Codiagro acredita también su compromiso con la responsabilidad corporativa. Así, el 1 de enero de 2017 introdujo la jornada continua entre sus trabajadores, característica gracias a la que es pionera entre los fabricantes de agronutrición.

La presidenta de la firma, Nieves Ruiz, explica que

“las mejoras en la calidad laboral y en la conciliación familiar están generando más productividad y eficiencia”. “Es clave potenciar el compromiso con los empleados para lograr un ambiente relajado y eficiente; un trabajador contento es mucho más productivo”, afirma.

En esta línea, Codiagro está optimizando su planta de Vall d’Alba y la oficinas anexas. Estas mejoras incluyen el aislamiento térmico de la fábrica y la remodelación de las oficinas para implementar las condiciones laborales, aplicar nuevas tecnologías y aumentar la eficiencia energética con la reducción de la huella de carbono.

Por último, desde la firma subrayan su participación en octubre en Fruit Attraction, la Feria Internacional de Frutas y Hortalizas de Madrid. En su séptima presencia consecutiva en la cita, Codiagro, presentará su nueva imagen corporativa.