El conocimiento de distintas lenguas es un valor en alza para abordar con garantías un futuro, que pasa por una sociedad globalizada y en la que la movilidad geográfica y el intercambio cultural son cada vez más frecuentes.

Por este motivo, la oferta formativa en lenguas como el inglés se ha incrementado notablemente en los últimos años. Este aspecto se aprecia tanto en los centros especializados como en las escuelas y campamentos de verano.

En el primero de los casos, academias y centros formativos, aumentan su oferta en verano con propuestas que incluyen desde cursos intensivos, dada la mayor disponibilidad de tiempo que puede conllevar la época estival; hasta estancias en el extranjero, intercambios y campamentos en otros países. En todos ellos, la conversación con nativos o docentes bilingües es uno de los valores más demandados, puesto que el aprendizaje de un idioma es mucho más dinámico y efectivo.

En este tipo de centros, además, en los últimos tiempos, se ha incorporado la enseñanza de otras lenguas, como el chino y el ruso, que vienen a sumarse al francés, alemán e italiano.

Por lo que respecta a las escuelas y campamentos estivales para niños y adolescentes, la presencia de la inmersión lingüística, especialmente en inglés, comienza a ser una constante, puesto que esta constituye una forma óptima para que los niños interioricen el idioma de un modo natural y lo asocien a estímulos positivos.

Por este motivo, los centros incorporan cada vez más este concepto, ofreciendo tanto el empleo del inglés como lengua vehicular en el desarrollo de la jornada, como una actividad más dentro del programa veraniego. H