Situaciones como las que se están viviendo a causa de la pandemia del coronavirus ponen de manifiesto la importancia que juegan los maestros en la formación de una ciudadanía crítica, que no solo necesita compartir conocimientos, sino también ponerlos en práctica y sumar esfuerzos para encontrar las mejores soluciones a las situaciones conflictivas.

La UJI cuenta, desde sus inicios y heredadas del antiguo Colegio Universitario de Castellón, con dos titulaciones vinculadas a la formación del profesorado: grado en Maestro de Educación Infantil y grado en Maestro de Educación Primaria. En el primer caso se encargan de la educación de los niños de 0 a 6 años, y se centran en las destrezas y conocimientos necesarios para los procesos de socialización y habilidades para el aprendizaje. Deben trabajar el desarrollo del movimiento, la comunicación y el lenguaje, las pautas de convivencia y relación social, el descubrimiento del entorno físico y social de forma globalizada, y se debe basar en experiencias, actividades y juegos. Para ello deben procurar el desarrollo de los niños en los niveles físico, intelectual, afectivo, social y moral.

El grado en Educación Primaria prepara para la actividad de los maestros en la educación de niños de 6 a 12 años. El trabajo profesional de la enseñanza consiste en proporcionar al alumnado una educación común, que fije las bases para su desarrollo integral: la adquisición de elementos culturales básicos, los aprendizajes relativos a la expresión oral, a la lectura, a la escritura y al cálculo aritmético, etc. Sus titulados desarrollan una actitud crítica que les permite diferenciar en cada momento cuál debe ser su actuación, teniendo en cuenta la situación educativa y necesidades del alumnado.

Niveles y prácticas

La formación de ambos grados contempla tres niveles básicos: formación profesional, desarrollo de actitudes que permitan una actuación educativa eficaz, y formación científica y cultural, y los capacita para ser transmisores de conocimientos, para formar al alumnado mediante técnicas y estrategias didácticas, y para buscar otros medios y recursos, porque cuenta con instalaciones propias para la realización de las prácticas de aula de diferentes asignaturas, como son los laboratorios de ciencias experimentales, el laboratorio de plástica o las aulas de música.

Prácticas en los centros

Uno de los aspectos destacados de ambas titulaciones es que el estudiantado puede realizar su estancia en prácticas en centros educativos de la provincia, durante 750 horas. Las prácticas se distribuyen durante el segundo, tercer y cuarto curso, y son obligatorias para todos. Gracias a ellas conocen la realidad de los CRA (colegio rural agrupado), CAES (centro de acción educativa singular) y/o CEIP (centro de Educación Infantil y Primaria).