La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, no se olvida de pedirle a Santa Quitèria salud para todos los vecinos pero también mano divina para “necesidades tan urgentes” como la construcción del colegio Regina Violant. La máxima autoridad municipal reconoce que su máxima preocupación esta semana es la seguridad y aboga por la conciliación de fiesta con el descanso vecinal.

--La figura de la reina y damas está en tela de juicio en algunas poblaciones y, sin embargo, usted lo reivindicó en el acto de presentación como un homenaje a mujeres valencianas anónimas…

-Es que estoy convencida de que su papel es fundamental en pleno siglo XXI. En lugar de vincularlas a la mujer florero que está ahí sólo para lucir trajes, la reina y sus damas tienen una oportunidad de primera magnitud para trasladar a las mujeres de su generación su independencia, su autonomía. Es momento de eliminar los prejuicios y aprovechar ese altavoz para que recojan el testigo de esas mujeres a las que nombré en el discurso como defensoras del progreso desde su ámbito.

--¿Qué le pide la alcaldesa a Santa Quitèria para Almassora?

-Ante todo, salud para sus vecinos. En este año he aprendido qué es lo más importante. Le pido que atienda necesidades tan urgentes como la construcción del Regina Violant y del resto de infraestructuras educativas, un cuartel digno, empleo para todas esas personas que vienen al Dia del Veí, que nos dé coraje para desprendernos de las etiquetas del pasado que nos vinculaban a la marginalidad o a ser ciudad dormitorio y nos enseñe a reivindicar nuestro potencial, que es mucho. Sin pretender ser mejores que nadie, tenemos que creer en nosotros mismos y ejercer de embajadores.

--¿Qué es lo que más le preocupa en la semana grande?

-La seguridad. Desde el primer minuto del día hasta que me voy a dormir me inquieta que pueda ocurrir cualquier accidente. Afortunadamente, en el recinto taurino tenemos al cirujano Gustavo Traver y en el resto de puntos calientes trabajan Policía, Guardia Civil, Protección Civil… Estamos en buenas manos.

--¿En qué se centra el dispositivo de seguridad diseñado?

-Los espacios más susceptibles son aquellos que congregan a un mayor número de personas. Romería, conciertos, reparto de les Calderes… Todo ello sin desatender la vigilancia en zonas que quedan más vacías de residentes en estas fechas.

--La Policía Local ha informado a los miembros de casales de la normativa de convivencia ciudadana antes de fiestas. ¿Habrá una especial vigilancia a los ‘casals’?

-Sí, los agentes llevan varias semanas recorriendo peñas y collas para informarles de lo que está permitido y lo que no, de los horarios de la música y también de sus obligaciones como usuarios del espacio público. Las fiestas no pueden servir de excusa para permitir comportamientos que no dejaríamos pasar en otros momentos del año.

--La oposición ha criticado que en su equipo de gobierno no haya modificado el reglamento de la Junta Local de Fiestas. ¿Tiene previsto hacerlo antes de que finalice la presente legislatura?

-No puedo comprometerme a que vaya a ser así. La Junta Local de Fiestas está funcionando como un gran equipo pese a que cada vez son más los actos programados y ello obliga a redoblar esfuerzos a los voluntarios. Tendríamos que asegurarnos de que modificar el reglamento no va a afectar a la función de sus integrantes y de que el resultado sería mejor que el actual.

--¿En qué punto está el proyecto de un polifuncional?

-Nuestra mayor urgencia es que el Regina Violant acabe de construirse para eliminar los barracones en ese espacio que albergará el polifuncional. Es una de nuestras promesas electorales y mantenemos la vigencia del proyecto porque estamos convencidos de que está ubicado en el punto perfecto y que permitiría eliminar los costes de la carpa y ofrecer un recinto digno de las necesidades de Almassora.

--Un mensaje para los vecinos.

-Les deseo felicidad, que disfruten con salud y con las personas que más quieren de los 127 actos programados en estas celebraciones.