Atender a mujeres con cáncer de mama, formar a cirujanos locales en las técnicas quirúrgicas más avanzadas para abordar eficazmente esta patología y ofrecer asistencia sanitaria a la población sin recursos. Son los tres principales retos con los que partió el pasado 19 de febrero la segunda expedición Medipinas. El destino, Filipinas. Los integrantes: nueve estudiantes de Medicina de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Castellón acompañados por su profesora (y cirujana de mama) Belén Merck, la cirujana Diana Escribano y el médico de familia Ricardo Ferragut.
A su regreso, esta misma semana, toca hacer balance y, al igual que ocurriera en la primera misión, parece que es muy positivo. En lo sanitario y en lo personal. Y es que los futuros médicos han atendido, siempre tutelados por el doctor Ferragut, a cerca de 2.000 personas en el sur de la isla. Los jóvenes han atendido a los pacientes de la clínica de las Hermanas Siervas de María y también se han desplazado a los depauperados barangais (poblados) de la zona para atender a las personas que no podían desplazarse. Sin duda, un verdadero maratón asistencial en el que los estudiantes de Medicina del CEU han realizado la historia clínica y la orientación diagnóstica y terapéutica de pacientes con diferentes procesos, especialmente tuberculosis y patologías de la piel, respiratorias y oculares, además de participar también en pequeñas cirugías.
La otra parte de la misión, la de ayudar a las mujeres con cáncer de mama en el Hospital Rizal de Manila, también se ha saldado con unos excelentes resultados, tal y como explica la doctora Merck. “Además de las intervenciones quirúrgicas, hemos formado a los cirujanos locales en técnicas más avanzadas, como la biopsia del ganglio centinela y la cirugía oncoplástica”, afirma la profesora y, a la vez, impulsora de las dos misiones Medipinas.
EXPERIENCIAS // En esta fase de Medipinas, los estudiantes de Medicina han sumado, así mismo, nuevas experiencias de gran valor para su aprendizaje, ya que han asistido a las cirujanas españolas y a los médicos filipinos en algunas intervenciones quirúrgicas.
Pero, a pesar del inmenso bagaje sanitario adquirido por los alumnos, lo que más pesa en la balanza del aprendizaje es la vivencia personal que traen consigo. Así lo asegura Marta Badenes, que ha viajado por primera vez con la misión Medipinas. “Esta experiencia me ha enseñado mucho, porque la forma en que la gente de allí afronta las enfermedades y sus dificultades es muy diferente: aceptan la situación que les toca vivir y, a pesar de no poder permitirse los tratamientos o acudir a un hospital cuando se sienten enfermos, lo llevan con dignidad. Cuando les preguntábamos cómo se sentían, nos explicaban que para ellos era más importante alimentar a la familia…”, cuenta la alumna. Y continúa: “He aprendido a valorar muchísimo lo que tenemos, y a ser consciente de que lo realmente importante no son las cosas materiales. En Filipinas muchísima gente carece de todo y aun así consigue ser feliz”.
La futura médico valora el aprendizaje técnico que trae consigo: “Allí ves una forma de practicar la medicina que aquí sería impensable. Cuentas con muy pocos recursos y debes intentar solucionar las situaciones con lo que tienes, algo que a veces es duro porque sientes mucha impotencia sabiendo que existen diversas técnicas o tratamientos que curarían esa determinada patología si estas personas estuvieran en otro entorno”.
Igualmente satisfecho por el resultado de la misión se muestra Matías Gómez, que ya participó en la primera edición de Medipinas. “Es una experiencia que engancha, y espero que haya sido el segundo de muchos años de voluntariado”, afirma. “Ver cómo crece un proyecto desde que nació y cómo va a más es impresionante”, asegura el futuro médico. El estudiante también quiere expresar su agradecimiento “por la generosidad de todas las personas que han colaborado con la misión y por aquellas que siguen preguntando cómo hacerlo”.
Este joven solidario se refiere al gran número de ciudadanos y entidades de Castellón que han colaborado con material o donativos en el proyecto Medipinas 2016, lo que ha permitido llevarse material médico, e incluso adquirirlo en Manila, para posibilitar más operaciones y ofrecer asistencia sanitaria a un mayor número de personas.
PROYECTO INTEGRAL // Medipinas, un proyecto integral que pretende ayudar a las personas y ofrecer una oportunidad de aprendizaje única para los alumnos en el plano médico y humano, ha contado en esta segunda edición con la participación de los estudiantes Álvaro Ferragut, Valentín Henarejos, África Cara, Marina Terroba, Leire Esparza, Ernesto Muñoz, Luis Gordillo, además de Matías Gómez y Marta Badenes.
La expedición, que de nuevo está auspiciada por la ONG Asociación Valenciana de Ayuda Social y Sanitaria y cuenta con la colaboración de la Cátedra de Solidaridad de la Universidad CEU Cardenal Herrera, ha superado los excelentes resultados obtenidos el curso pasado, donde además de atender a diversas mujeres con cáncer de mama, se ofreció asistencia sanitaria a cerca de 300 pacientes de la Clínica de las Hermanas Siervas de María de Manila. H
