Cuando ayer se izaba la bandera azul en la playa de les Marines de Nules, un gesto tan común a lo largo y ancho del litoral de la Comunitat Valenciana, en este municipio se vivía un momento histórico, y es que es la primera vez en la que los vecinos y visitantes la verán ondear en la localidad. Nunca antes se había conseguido esta distinción de calidad europea, pese a que han sido muchos los intentos.

Así lo recordó el alcalde, David García, quien aseguró que la consecución de este distintivo es “un reconocimiento a muchos años de trabajo, de varios gobiernos que se han empeñado en mejorar nuestras playas y dotarlas de servicios”, una dedicación que ha contado “con la implicación de diferentes departamentos del Ayuntamiento”, de ahí que la bandera azul sera el resultado de un “esfuerzo colectivo”.

Izar la bandera azul en la playa de les Marines, sin embargo, no es un punto y final. Desde el consistorio asumen el reto de “seguir en esta línea, mejorando servicios y ofreciendo más opciones a los ciudadanos”, de ahí que el reconocimiento se haya convertido en un punto de inflexión, un mensaje contundente que reivindica que sí, en Nules también es posible. A juicio de García “se trata de intentar ampliar esas mejoras que se han hecho en les Marines al resto de las áreas de baño, para que año tras año vayamos prosperando y acupando el lugar que nos corresponde”.

De momento, Nules ya forma parte de ese católogo internacional que permite a los turistas identificar los puntos del litoral --en este caso castellonense-- que destacan por una serie de requisitos que responden a unos estándares de calidad muy estrictos, tanto que hasta ahora, a pesar de los múltiples intentos, la localidad no había logrado cumplir.

La inversión que posibilitó recuperar el aspecto original del litoral, con una playa dunar, con vegetación propia del Mediterráneo, fue determinante y en ello hubo que reconocer la cesión de los vecinos, que tuvieron que renunciar a utilizar de un camino para acceder a sus viviendas, pero el esfuerzo ha tenido finalmente su compensación.

Como el resto de playas del territorio europeo, la concesión de la bandera garantiza la prestación de servicios, la calidad de las aguas... Y por mantener esas características de sostenibilidad, a cambio Nules obtiene un plus de promoción turística que “nos suma muchas playas que tienen este reconocimiento”.

PROTECCIÓN DEL LITORAL

Pero para el Ayuntamiento de Nules, el desarrollo de su litoral pasa, necesariamente, por una política activa de protección. La regresión marina que ha amenazado a las playas al sur del puerto de Burriana, se ha convertido en el principal caballo de batalla del consistorio y los vecinos. El alcalde ha incidido en numerosas ocasiones en los múltiples atractivos que ofrece la playa de Nules, con espacios singulares como el paraje natural municipal de l’Estany y todo su entorno, o la amplia programación de actividades estivales, pero todo esfuerzo resulta infructuoso si, temporal tras temporal, la costa de la localidad se ve amenazada y castigada por la nula protección existente hasta el momento.

Vecinos y Ayuntamiento siguen trabajando por proteger sus valores patrimoniales, al ser el futuro de un municipio con mucho potencial.