La consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, anunció ayer que van a recurrir la sentencia que declara contraria a derecho la resolución del 2017 que determinó el traslado de los menores del centro de las monjas capuchinas de Segorbe. Oltra aclaró que el centro de infancia «no se cerró nunca», sino que actuaron teniendo en cuenta «el interés superior» de los niños y por tanto los trasladaron a otro lugar, porque cuando se tiene a menores tutelados lo primero que hay que tutelar son sus derechos.

La vicepresidenta explicó que la sentencia «reconoce» que el informe de inspección que hablaba de duchas frías en enero, de privación de comida como castigo, de que se llevaba a los menores a mendigar a los supermercados y se les daba comida caducada en mal estado «es así». «Cualquier persona responsable en un departamento que tutela a los niños hubiera hecho lo mismo. Ante el riesgo al que se estaba sometiendo a estos niños, la Conselleria actuó, trasladándolos y poniéndolos en un entorno seguro», dijo Oltra.

Por ello, el Consell recurrirá la sentencia, «en sintonía completamente» con los argumentos dados por la Fiscalía cuando en su día se recurrió la actuación de la Conselleria en el centro de Segorbe.