El distrito marítimo vive un año más y con especial intensidad sus fiestas patronales en honor a Sant Pere. Todo el Grao, sin excepción, se vestirá estos días de fiesta para la celebración de diversos espectáculos. Las calles, verdadero epicentro de la celebración, se llenarán de ruido y color, de risas y buen ambiente, gracias a las peñas y a los graueros que durante esta semana darán el máximo para disfrutar de unos festejos que desde hace más de 60 años se vienen celebrando.
Las fiestas de Sant Pere son una de las más populares del calendario anual de la capital de la Plana. La gran diversidad de actividades, su dinamismo y carisma han hecho de ellas uno de los iconos no solo de la ciudad sino de toda la provincia castellonense. Cada año es singular. En este sentido, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, remarca que “las fiestas de Sant Pere del Grau son este año unas fiestas diferentes, hechas y pensadas entre todos y para todos y todas”.
GRAN ESFUERZO
La máxima representante municipal asegura que “el consistorio quiere reconocer el esfuerzo de todas aquellas personas y colectivos que hacen posible estas fiestas y el apoyo de tantas entidades que están dispuestas a colaborar desinteresadamente para convertir estos días una semana de tradición, de sentimiento y de identidad de un pueblo marinero”.
La historia, escribía Joan Morales en Mediterráneo hace ya once años, “siempre se hace poco a poco, y las fiestas de Sant Pere no son una excepción”. Desde que en 1956, punto de inflexión de estas celebraciones con la creación de la Junta de Festes, esta festividad no ha hecho más que crecer en espectacularidad. Y es que para los graueros ver cómo estas fiestas ya sobrepasan las cinco décadas supone un verdadero orgullo.
PARTICIPACIÓN
Es por ello que la alcaldesa de la ciudad invita “a todos los vecinos y vecinas a disfrutar de la programación, de la calle, del clima y de la buena compañía, siempre con el respeto necesario para vivir la fiesta con intensidad”. Aunque, eso sí, Para Marco es esencial que “convivamos en armonía”, dejando a un lado “la rutina y participar en todos aquellos actos que este año se han preparado. Porque la participación será el mejor relato de unas fiestas, las de Sant Pere, que son el testimonio de todo lo que el Grao nos brinda al resto de la ciudad y a quienes nos visitan”.
Sin duda alguna, hoy en día las fiestas de Sant Pere constituyen una ilusión para los vecinos. Son, qué duda cabe, unos festejos que se salen de lo normal, que tienen una significación diferente. H
