Broche de oro, pese a la inoportuna lluvia, a 48 horas de música non stop en el Red Pier Fest. Aunque las inclemencias meteorológicas dejaron al público sin el frat rock de los británicos The Fuzillis y sin los temas de Toundra, los centenares de asistentes al festival del embarcadero rojo regresaron a casa con un buen sabor de boca como balance del certamen en el Grau, después de un último intento de la organización de cubrir las cancelaciones obligadas de última hora con las sesiones en la zona de dj.

El público vivió una segunda jornada de contrastes, matices, sensaciones y bienaventuranzas musicales. De propuestas de energía vibrante y voltaíca. Como la de The Rebels, esencia del rock alternativo y las raíces punk con influencias de bandas tan conocidas como Nirvana, Franz Ferdinand y Beatles. Fijos en la cartelera madrileña, fueron los encargados de abrir la sesión sabatina y ofrecieron los temas de su último disco contundentemente titulado Mafia. Tras ellos, Junior Mackenzie (alter ego de Juan Fortea), viajado por el mundo, pero no profeta en su tierra. Ofreció sus ritmos electrónicos que tanto lo encumbraron en sus inicios.

Después, Flamingo Tours con el rock más profundo y tórrido, evocando los pantanos del blues, el soul viejo, la cocina tex-mex y un poquito de satanspell y de rhythm’ n’ blues. Raíces americanas, amor hillbilly, desiertos de Nuevo México y las fronteras de la piel. Acartelados también estaban Vancouvers, pioneros de la música alternativa, que aderezaron la calidad de un Red Pier apoteósico en su tercera entrega.