El Benicàssim Electrònic Festival (BEF), patrocinado por Giuliani’s, ha cerrado su cuarta edición con gran éxito y batiendo todos los récords. El balance de la organización arroja que fueron alrededor de 6.000 asistentes los que difrutaron del evento musical este año, lo que supone un incremento del 30%. El pasado ejercicio fueron 4.000 befers los registrados en los dos días.

En cuanto al impacto económico, la organización estima que el certamen de música electrónica ha dejado 1.080.000 euros, según informaron a este periódico.

La jornada más multitudinaria del festival fue la del sábado. Aunque finalmente la gran cabeza de cartel prevista para esta edición, Miss Kittin, no pudo actuar por enfermedad, cancelándose la actuación pocas horas antes, fue sustituida rápidamente por la artista Cora Novoa.

La reconocida pinchadiscos está considerada como la madrina del BEF, tras haber actuado ya en las ediciones del 2015 y 2016, y ofreció una espectacular sesión en la que hizo vibrar al público.

Por el certamen también pasaron otros grandes artistas del panorama nacional e internacional como Andrés Campo, San Proper y Nuke, entre muchos otros conocidos y más de una veintena de representantes locales.