La gran pantalla se ha convertido en un recurso para dinamizar social, cultural y turísticamente los municipios más pequeños de la provincia este verano. A través del Ciclo de Cine de Verano y Animación Musical, la Diputación llena de actividad las noches de más de medio centenar de localidades. En concreto, se trata de 53 pueblos con menos de 275 habitantes, todos ellos en el interior.

Con el objetivo de que todos los vecinos de la provincia pudieran disfrutar de este verano, se han impulsado diferentes actividades hasta el 30 de septiembre --desde el 15 de julio--. «El interior se beneficiará de una importante oferta de ocio sin necesidad de abandonar sus pueblos», asegura el vicepresidente y diputado de Cultura, Vicent Sales, quien resalta la relevancia de la iniciativa del gobierno provincial. Dicha propuesta «permite que el mundo rural castellonense tenga en la gran pantalla un atractivo cultural e iguala las oportunidades de todos los habitantes de Castellón, residan donde residan», continúa.

Bajo este ciclo cultural se prevé reunir a 10.000 personas «alrededor de la gran pantalla y al compromiso decidido de la Diputación con el interior castellonense podrán disfrutar de esta importante oferta de ocio sin necesidad de abandonar sus pueblos», explica. Con el objetivo de dinamizar las actividades lúdicas y culturales se está realizando en Alcudia de Veo, Algimia de Almonacid, Almedíjar, Castell de Cabres, Torás, Vall d’Almonacid, Castellfort, Cirat, Fanzara, la Pobla de Benifassà, Portell de Morella, Teresa, Herbés y Torrechiva, entre otros, hasta sumar los 53.

Más parques hinchables

La Diputación también lleva parques infantiles a un total de 104 municipios de la provincia menores de 2.000 habitantes durante este verano como parte de su trabajo encaminado a combatir la despoblación, especialmente en las zonas del interior.

Esta actividad de parques infantiles organizada desde el área de Cultura de la Diputación consiste, básicamente, en la instalación de varias atracciones hinchables que se han comprobado que son aptas para el público más pequeño de los pueblos, que suelen instalarse en los municipios coincidiendo con alguna de las festividades que celebran, siempre de acuerdo con las necesidades del ayuntamiento solicitante.