Castellón El parque Ribalta de Castellón se convirtió, ayer, en el epicentro cultural para los más pequeños de la ciudad. Y es que los niños pudieron disfrutar de un festival hecho a su medida, ‘Feretes i cançonetes’, que reunió a decenas de familias que pudieron participar en variados talleres, además de bailar al ritmo de la música. Circo, muixerangues, actividades con máscaras, libros y juegos tradicionales hicieron las delicias de los niños. Hoy de 11 a 15.00 horas seguirá el festival con reggae, la banda municipal, entre otros. RD