Organista titular de la Basílica de la Sagrada Familia, reconocido en escenarios de todo el mundo, el castellonense Juan de la Rubia debutará el día 27 en la Schubertiada de Vilabertran junto a la trompetista Mireia Farrés, un festival del que valoró su «autenticidad». En una entrevista con Efe, el músico de la Vall d’Uixó muestra sus ganas de sentarse ante el teclado del órgano de la Basílica de Castelló d’Empúries (Girona) para ejecutar un programa que incluye obras de Clarke, Corrette, Bach, Purcell y Telemann, al lado de Farrés, «una música excepcional», apuntó.

A su juicio, uno de los privilegios que tienen los organistas es que tocan «instrumentos históricos, que podrían estar en un museo, y les damos vida, les sacamos todas sus posibilidades. Es muy bonito poderte hacer amigo del instrumento lo antes posible para sacarle lo mejor».

Respecto a su trabajo en la Sagrada Familia, aseveró que es «un orgullo, un placer y una responsabilidad, porque todo lo que allí ocurre tiene un eco cultural, nada pasa desapercibido».

Rememoró que cuando se incorporó, «el proyecto era nuevo y no había vicios y, aunque mi trabajo va muy ligado a la liturgia dominical, se trata de que en los próximos años la Sagrada Familia se convierta en un espacio musical y cultural de encuentro de diferentes propuestas artísticas y estéticas, con una programación ordenada, adecuada al templo religioso que es».

No esconde que está ilusionado con el proyecto porque «es de futuro» y destacó que ahora hay un órgano de coro, pero «en las grandes catedrales europeas suele haber también el que se ubica en la fachada principal, que en la Sagrada Familia aún no existe». Preguntado por sus próximos proyectos artísticos, Juan de la Rubia avanzó que tiene programados conciertos en diferentes formatos en Alemania, Francia, Portugal y también como director de un concierto de la Orquesta Sinfónica de Bilbao, entre otros.