Que el Auditori Leopoldo Peñarroja de la Vall d’Uixó esté gestionado por el Teatro Olympia de València es sinónimo de calidad garantizada. Cada temporada un reguero de artes escénicas de la Comunitat Valenciana se instalan en el recinto de la Moleta con producciones que no llegan a la capital de la provincia.
Es el caso de L’Electe, original de Ramón Madaula con la valencianización del texto por Juli Disla, la dirección de Carles Sanjaime y protagonizada por dos actorazos de vieja escuela de dramaturgia: Josep Manuel Casany y Alfred Picó. Solo la veterana compañía L’Horta (de tantas trincheras y vanguardia, de nueves de octubre y solsticios de transición, de infinitos imaginarios colectivos) podia hacer la obra. Solo ella.
El argumento es muy sencillo, pero también inquietante, que deja en el espectador una agridulce sensación solo solventada por las sonrisas que generan sus personajes, parodia de ellos mismos con un discurso enternecedor: Un presidente (en esta caso de la Generalitat valenciana) acaba de ganar las elecciones y antes de su investidura conversa con un psicólogo. En esa charla el president descubrirá o confesará «los verdaderos motivos que le han guiado hasta ese momento». La representación será el 16 de octubre, a las 20.00 horas, dentro de la temporada del Auditorio vallduxense.
El director de la obra, Sanjaime explica el factor L’Electe: «El poder desde la comedia, la fragilidad, la humanidad o más bien sobre la personalidad y el patetismo».
➡️ «Tarde o temprano siempre llega el momento en el que no podemos asumir nuestro propio discurso, lo que nos conforma, y entonces saltan todas las alarmas y, agotados, dejamos de creer en nosotros mismos, en lo que hemos decidido proyectar a los demás, y es cuando necesitamos ayuda».
«L’Electe no es Ximo Puig, claro está, aunque podría ser. « Sí es una crítica social sobre el poder y las personas que lo ostentan», asegura el director de la obra teatral. Añade que «tampoco es la hipocresía del poder y su crueldad y la indiferencia de la gente hacia sus políticos... o sí, o solo es eso»,
«La naturaleza de la obra es un pieza cómica en la que la carga ideológica es muy pequeña», afirma contundente el director de la trama «con referencia a la actual y galvanizada y sorprendente realidad política de la Comunitat Valenciana», manifiesta Sanjaime.
También hay referencias a los pactos, como el del Botànic para «suturar el govern del Consell».
«NADA Y TODO» // «Nada de estos axiomas están en la obra, y todo tiene que ver», incide Sanjaime en un alarde sinceridad teatral, que al fin y al cabo es lo que busca esta deliciosa comedia de conclusiones necesarias, «reflexionar sobre que también los políticos son humanos, y si L’Electe fuera Ximo Puig, también», concluye. H
