La feria MARTE cerró ayer su cuarta edición con un notable éxito de público y de ventas. Así lo explicó a Mediterráneo Joan Feliu, coorganizador del evento junto a Enrique Bocángelus. La cita, que abrió sus puertas al público el viernes, logró alcanzar la cifra de 7.000 visitantes, 800 más que en la edición anterior.

Para Feliu, el dato es doblemente importante, ya que «prácticamente la mitad proceden de fuera de la provincia de Castellón», lo que implica que se ha logrado atraer a un público «muy especializado». La organización también hizo extensiva la buena nota a las ventas, pues «la mayoría de los 17 galeristas han quedado muy satisfechos tras los tres días».

Según Feliu, esta edición ha sido «la de la consolidación». El motivo es que, tras varios años apostando por un campo específico dentro del ámbito del arte contemporáneo, en esta ocasión se optó por hacer una combinación que diera cabida a todas ellas, «con lo que ha habido que redimensionar el espacio en el Auditori». La sensación entre los responsables de MARTE es que han «dado con la tecla» para convertir el certamen «en una de las citas más selectas del panorama español», y que de seguir por esta senda la feria se convertirá «en un espacio en el que los artistas querrán venir a exponer».

PROGRAMACIÓN PARALELA // Uno de los puntos fuertes del evento en esta ocasión ha sido la intensa programación paralela, que ha servido para dar a conocer a galeristas y público otros espacios culturales de la provincia.