El arquitecto argentino César Pelli, autor de las Torres Petronas de Kuala Lumpur (Malasia) y del World Financial Center de Nueva York (EEUU), entre otras construcciones de renombre, murió este jueves a los 92 años, según ha confirmado Juan Manzur, gobernador de Tucumán (norte de Argentina), provincia natal del fallecido.

Nacido en 1926, Pelli se convirtió en un arquitecto de prestigio internacional y dejó su impronta en varios rascacielos y edificios de todo el mundo, lo que le llevó a la consecución de más de 300 premios de excelencia en diseño.

Uno de sus principales trabajos son las Torres Petronas, que con sus 88 plantas y 455 metros de altura ostentaron el título de edificios más altos del mundo desde 1998 hasta el 2003.

CARRERA EN ESTADOS UNIDOS

Licenciado en Arquitectura por la Universidad de Tucumán, desarrolló gran parte de su carrera en Estados Unidos, donde fundó en 1977 la empresa Cesar Pelli & Associates -actualmente denominada Pelli Clarke Pelli Architects-, y se convirtió en decano de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Yale, en el estado de Connecticut.

Entre los diversos galardones que el argentino logró, destaca la Medalla de Oro del Instituto Americano de Arquitectos que consiguió en 1995 por su distinguida trayectoria.

Además de las Torres Petronas, Pelli fue el arquitecto detrás del World Financial Center de Nueva York, la Torre Iberdrola de Bilbao y la Torre Pelli de Sevilla, ambas en España, la Gran Torre Santiago en la capital chilena o la Torre YPF de Buenos Aires.

LUTO EN ARGENTINA

El gobernador de Tucumán, Juan Manzur, expresó en Twitter sus condolencias por el fallecimiento de Pelli y lamentó su pérdida.

"La trayectoria mundial del arquitecto Pelli ha sido un orgullo no solo para los tucumanos, sino también para todos los argentinos. Un hijo de esta tierra que trascendió por la calidad y monumentalidad de sus obras y por su enorme capacidad de trabajo", afirmó Manzur.

Asimismo, el presidente provisional del Senado argentino, Federico Pinedo, sostuvo que la muerte de Pelli es una "gran pérdida" por su "visión de grandeza, confianza en la creatividad propia, esfuerzo y trabajo, originalidad y genio, belleza y utilidad".