El cine español dice «aquí estoy yo». Con sus thrillers y sus dramas. Hipotecados productores, directores, actores, montadores, sonidistas y maquilladores, entre otros, se vistieron ayer de largo en Madrid para celebrar la gran gala del año: los Goya. Después de un 2016 movidito, variado y taquillero, los académicos dictaminan qué película ha sido la mejor. Este 2017 viene de la mano de Tarde para la ira, debut en la dirección del actor Raúl Arévalo: de los thrillers El hombre de las mil caras (Alberto Rodríguez) y Que Dios nos perdone (Rodrigo Sorogoyen) y los dramas firmados por Pedro Almodóvar (Julieta) y J. A. Bayona (Un monstruo viene a verme).

Dani Rovira repite por tercer año como presentador de la noche del cine. A pesar de las dudas tras la gala del año pasado, el actor y humorista ha querido ser el encargado de conducir y darle su toque personal a la velada. «Será una ceremonia divertida, pero iré con pies de plomo», contaba Rovira antes de iniciar la velada.

De esta forma, la alfombra roja encendió ayer sus luces para recibir a los rostros más conocidos, y menos en algunas ocasiones, del séptimo arte. Antonio de la Torre, candidato al Goya de actor protagonista por Tarde para la ira confesó que «en el último momento me pondré nervioso seguro».

Una de las polémicas generadas han sido las declaraciones de Rajoy sobre las películas nominadas al asegurar: «No las he podido ver, para mi desgracia no voy al cine; solo leo novelas».

Este año será la primera vez que que la diseñadora de vestuario, Yvonne Blake, acude a la gala como presidenta de la academia.

A la ceremonia acudieron las personalidades políticas más relevantes del país, entre ellos, el ministro de Educación, Cultura y Deporte. Los grandes ausentes fueron los Reyes de España.

GOYA DE HONOR // Ana Belén recibió anoche el reconocimiento a toda su trayectoria cinematográfica recibiendo el Goya de Honor de este año 2017. Un premio que la convierte en la quinta mujer en recibir este galardón en la historia del cine español.

Las reivindicaciones más sonadas han sido precisamente para ensalzar el papel de la mujer en el cine. La intérprete Cuca Escribano desplegó, tras pisar la alfombra roja, un chal en el que podía leerse: «Más personajes femeninos». Candela Peña alegó que «trabajen más las mujeres, tenemos apenas un 25% de presencia, y eso que España tiene una gran tradición de actrices».