'Roma', 'La favorita', 'Ha nacido una estrella' y 'El vicio del poder compiten en primera línea de la carrera de los galardones de la Academia de Hollywood. ¿Por qué han atraído a los académicos? ¿Cuáles son sus opciones reales?

'ROMA', de Alfonso Cuarón - 10 nominaciones

A la hora de valorar las posibilidades de victoria que la obra maestra de Cuarón tiene en las categorías en las que es candidata conviene tener en cuenta una de las categorías en las que no lo es. De entrada, la estadística dice que, si una cinta no parte como candidata a la estatuilla al Mejor Montaje, sus probabilidades de ganar el Oscar a la Mejor Película son nimias: desde 1934, solo nueve títulos lo han logrado. Si esa tradición resulta cumplirse de nuevo, casi seguro será porque, por otra parte, los votantes han considerado Roma como la Mejor Película de Habla No Inglesa; que salga derrotada en ambas categorías no se entendería.

La ausencia de la película entre las cinco aspirantes al premio al Mejor Montaje sirve asimismo para confirmar a Cuarón como el gran favorito a ganar la estatuilla al Mejor Director; porque da a entender que los académicos han comprendido que la apabullante expresividad de 'Roma' no está tanto en el diálogo que sus planos mantienen entre sí como en todas las cosas magníficas que Cuarón orquesta en cada uno de ellos.

'LA FAVORITA', de Yorgos Lanthimos - 10 nominaciones

Si hace solo un año nos hubieran dicho que la próxima ficción de Yorgos Lanthimos acumularía 10 nominaciones al Oscar, entre ellas Mejor Película, nos habríamos echado a reír; el del griego siempre había sido el tipo de cine que o bien se ama o bien se odia: es demasiado raro, demasiado grotesco y demasiado misántropo. Y el caso es que, pese a ser rara y grotesca y misántropa, 'La favorita' gusta a todo el mundo, o casi. Quizá sea por la precisión con la que entremezcla conflictos de clase social y de sexo y de política, o por su capacidad única para provocarnos la risa y a la vez hacernos polvo; el caso es que es una de las aspirantes más sólidas al premio gordo.

Es más que probable, eso sí, que la Academia no se hubiera mostrado tan generosa con ella de no ser por las extraordinarias interpretaciones de Emma Stone, Rachel Weisz y Olivia Colman sobre las que se apoya. Que las dos primeras compitan la una contra la otra en la categoría de Mejor Actriz de Reparto, es cierto, perjudica las opciones de ambas; pero nadie en su sano juicio dejaría a Colman volver a casa de vacío.

'HA NACIDO UNA ESTRELLA', de Bradley Cooper - 8 nominaciones

Habla del 'show business', y eso de por sí le otorga una posición de privilegio. De entrada, porque si repasamos las más recientes ceremonias de los Oscar, veremos que tres películas más o menos centradas en ese mundo -'The artist', 'Argo' y 'Birdman'- se llevaron la más preciada estatuilla; y que una cuarta, 'La La Land', también la tuvo entre sus manos unos segundos, y en todo caso acabó ganando seis premios. Ha nacido una estrella, además, retrata el sacrificio que los artistas sufren en su camino hacia el éxito, y todos los académicos están convencidos de haber pasado alguna vez por eso.

Por otra parte, cabe decir que la película solo es favorita clara en dos categorías -Mejor Canción Original y Mejor Mezcla de Sonido-, y que sus opciones de conseguir algún Oscar actoral son mucho menores ahora que hace unas semanas, antes de que Hollywood iniciara su temporada de premios. Respecto a la ausencia de Cooper entre los nominados a Mejor Director, ¿resta posibilidades al filme en la categoría de Mejor Película o, por el contrario, se las suma? Misterio.

'EL VICIO DEL PODER', de Adam McKay - 8 nominaciones

La generosa presencia que 'El vicio del poder' ha logrado en esta y otras listas de nominados durante la presente temporada de premios de Hollywood solo resulta explicable si acudimos al argumento político: en última instancia es una película anti-Trump y, a ojos de la Academia, por si solo eso ya es un mérito. En cualquier caso, la biografía del considerado como el vicepresidente de Estados Unidos más funesto de toda la historia del país ha resultado ser profundamente divisiva entre la crítica y, en caso de que entre los académicos se repita tan marcada disensión, sus posibilidades de triunfo en la categoría de Mejor Película sin duda se verán mermadas. En cambio, se da por descartado que su protagonista, Christian Bale, se quede sin el Oscar al Mejor Actor por su interpretación de Dick Cheney; y no todo está perdido para Amy Adams en la categoría de Mejor Actriz de Reparto aunque las quinielas sitúen como favorita a Regina King. Ya va siendo hora, además, de que le den la estatuilla: esta es su séptima nominación.