Tiempo de ensayos y de nervios para El Taronger. La compañía que dirige Santi López clausura el próximo fin de semana (7 y 8 de abril) el ciclo Castelló a Escena con La venganza de Don Mendo, de Pedro Muñoz Seca, obra cumbre del astracán, un género cómico menor que solo pretende hacer reír a toda costa.

Y lo hace con un montaje coral en el que «participa una treintena de actores», señala López, quien no esconde «la complejidad de dirigir a tanta gente». Una representación especial que conmemora el centenario del estreno de esta comedia, un 21 de diciembre de 1918, en el Teatro de la Comedia de Madrid.

López hace realidad su sueño: «Es la obra que siempre he querido hacer; ya de pequeño me sabía de memoria una parte de la misma», relata, quien añade que «es la tercera obra de teatro en español más representada, después del Tenorio (primera), y, Fuenteovejuna (segunda).

Asimismo, López reivindica la figura de un autor teatral «marginado porque fue franquista, pero que tiene obras muy divertidas, de un humor muy blanco, que son verdaderas maravillas y juguetes cómicos que tienen una gran aceptación popular». «Con Muñoz Seca la diversión está asegurada», manifiesta, y añade que «es puro astracán».

La venganza de Don Mendo es una obra dividida en cuatro actos, en la que abundan los juegos de palabras y golpes de humor; una reducción al absurdo de los elementos propios del drama histórico en una parodia.

López cita a algunos de los actores que participan: Noelia Agramunt, Juan Antonio Castell, Carmina Leal, Vicent Rodrigo, Sergio Sánchez, Vicente López, Sofía Royo y él como Don Mendo, que se siente orgulloso y satisfecho del trabajo coral. Buenos actores y un buen proyecto.