El pintor Vicente Traver Calzada instala dos nuevos cuadros en la Concatedral de Santa María. El presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, comprobó ayer, junto al vicepresidente primero y diputado de Cultura, Vicent Sales, el acabado de los trabajos. Las obras forman parte de un proyecto que contribuirá «a mejorar el patrimonio cultural de la ciudad».

El presidente explicó que el patrimonio sacro «es motivo de orgullo para todos los castellonenses», y añadió que es, a su juicio, «un importante activo para la dinamización de nuestra tierra». Moliner quiso destacar que el proyecto tiene la finalidad de aportar a la Concatedral de Santa María una obra única y dejar un legado de patrimonio provincial en un lugar histórico».

El trabajo de Traver comenzó hace cuatro años y a partir de ahora realizarán aportaciones de un cuadro cada año, según Moliner. Además, el presidente anunció que este año «se incorporarán dos cuadros que junto con los dos restantes completarán el gran retablo central de la concatedral». La institución provincial lleva colaborando desde el 2014 en todas las fases de la realización «de este gran conjunto artístico que conformarán el retablo de tan preciado lugar», subrayó. Asimismo, el dirigente aseguró que la calidad prima en la dotación artística de los fondos propios que la Diputación adquiere cada año y que han servido «para consolidar la colección de cuadros que hoy están expuestos en el Museu de Belles Arts o en el propio Palacio Provincial y otras instituciones».

En sus declaraciones Moliner confirmó que la colaboración, que ha supuesto en torno a los 30.000 euros, «es el mejor legado de obra pictórica que podíamos hacer» y añadió que Traver «tenía que formar parte de nuestra colección extraordinaria de obras de pintores de Castellón».