El ciclo de coloquios En primera persona de la Fundació Caixa Castelló acogió ayer la charla del cantautor Víctor Manuel, que mostró al público una de sus pasiones menos conocidas, la gastronomía. La jornada fue todo un éxito y la sala se llenó hasta la bandera.

El invitado debe su prestigio a su faceta como cantante, si bien desarrolló su lado como consumado cocinero, un gusto que le viene tanto por su amor por la cocina y sus secretos como por el carácter social que este arte encierra. «Asocio los recuerdos a los sabores y a los olores que descubro entre fogones porque cocino para la familia y siempre nos reunimos en torno a una mesa», afirmó el célebre y querido intérprete.

Si en Antes de que sea tarde ofrecía recuerdos y vivencias personales y profesionales, Víctor Manuel aúna ahora tradición, gastronomía y experiencia en su nueva publicación, con la que repasó ante el público de Castelló algunas de sus anécdotas más interesantes. «No es solo un libro de recetas, si bien tiene mucho de costumbrismo de las tierras asturianas, de sus potes y fabadas. Durante la gira de El gusto es mío comimos mucha carne y platos fuertes; el pobre Miguel Ríos no podía ir al baño», recordó entre sonrisas.

Un recorrido emocional que, en definitiva, supuso un mapa íntimo de su historia, y que contó con una cálida acogida por parte de los asistentes, que atendieron al invitado con sumo gusto.