En la Eurocopa hay cinco debutantes, algunas sorprendentes como Irlanda del Norte o Islandia, pero ninguna tan chocante como Albania, un país de tres millones de habitantes (los que tiene Madrid) que se ha plantado en Francia tras un heroica travesía llena de sobresaltos pilotada por el seleccionador Gianni de Biasi, de 59 años.

El milagro no se prolongó en el debut de este sábado ante Suiza(1-0) pero la gesta albanesa merece un reconocimiento. En el estreno, el gol a los cinco minutos de Schar, la expulsión del capitán Cana (m. 37) y las ocasiones claras falladas acabaron condenando a Albania, que seguirá plantando batalla.

Ya se acabaron las goleadas humillantes del pasado. Albania se encuentra entre las 24 elegidas de una cita a la que no llegaron Holanda, campeona de 1988; Dinamarca (1992) o Grecia(2004). Ubicada en el puesto 42 de la FIFA, el peor 'ranking' de las participantes, el auge albanés se cimenta básicamente en el coraje y el corazón, con un trabajo iniciado en diciembre del 2011, cuando De Biasi llegó al banquillo.

EXPERIENCIA EN EL LEVANTE

Entonces, ni siquiera tenía suficientes jugadores para formar un conjunto fiable. Antes de aterrizar en Tirana, el técnico se había recorrido todo su país en clubs como el Bassano, Vicenza,Vastesse, Carpi, Cosenza, Módena, Brescia, Torino y elUdinese, donde solo duró dos meses (de diciembre del 2009 a febrero del 2010) y acabó desencantado. Fue su último club antes de tomar las riendas de Albania. Antes también estuvo medio año en el Levante, entre octubre del 2007 y abril del 2008.

De Biasi inició el reclutamiento en busca de los jóvenes albaneses de doble nacionalidad que hasta entonces siempre se habían decantado por dar la espalda a su país de origen. Albania no contaba con estadísticas ni ficheros de todos sus jugadores, así que buceó en internet en busca de las terminaciones albanesas de los apellidos.

Suiza, Alemania, Grecia, Francia, Turquía... País por país, fue recopilando información y captando fieles. "Trajo a muchos chicos preparados para luchar y darlo todo por nuestro equipo nacional. Nos convenció de que incluso siendo un equipo pequeño se podía ganar", rememora el portero Etrit Berisha, del Lazio.

MILES DE KILÓMETROS

"Somos un pueblo dividido por fronteras, en Albania viven tres millones, pero somos 10 millones, y eso lo entendió pronto el entrenador. Se dedicó en cuerpo y alma a traer a los mejores albaneses. Vio que somos gente que cuando luchamos por nuestro país somos combatientes. Vio esa fuerza y supo canalizarla", reflexiona Cana, del Nantes, que habla cinco idiomas.

De Biasi recorrió miles de kilómetros para convencer a los chicos y, poco a poco, fue creando un bloque competitivo. "Les dije que si me seguían y ponían todo el corazón serían recordados en la historia de Albania por ser los primeros en jugar competiciones importantes. Si uno no cree fortísimamente en una cosa es imposible alcanzarla".

EL DRON DE BELGRADO

No le bastó ese discurso para jugar el Mundial de Brasil, pero sí para estar en Francia, con una trayectoria que se inició con un triunfo ante la Portugal de Cristiano Ronaldo (0-1). Luego vendría el empate frente a Dinamarca y el bochornoso capítulo del dron en el encuentro contra Serbia suspendido en Belgrado.

“Fue un partido con una tensión extrema. Nos tiraron piedras en el calentamiento, nos humillaron. En el equipo había gente que había perdido familiares en la guerra de Kosovo, fue terrible", recuerda Cana. El choque se suspendió después del caos generado con el dron que llevaba la bandera con el mapa de la gran Albania anterior a 1913.

El TAS acabó dando el triunfo a los albaneses, pero los serbios devolvieron el golpe en Tirana y Albania tuvo que sufrir hasta el final para cumplir su sueño gracias a una victoria en Armenia en la última jornada.

EL RECUERDO DE 1946

No lograba algo tan grande la selección albanesa desde 1946, cuando levantó el único trofeo de su historia, la extinta Copa de los Balcanes. Siete décadas después, la generación actual ha recuperado el orgullo albanés por su selección.

Albania lo tendrá difícil en Francia para cumplir un papel decente, pero cuando se cree en algo todo es más sencillo. "Si persigues un sueño con todas tus fuerzas a veces se cumple", sentencia De Biasi. En el estreno ante Suiza sus hombres rozaron el empate. El miércoles se medirá con Francia y cerrará la primera fase contra Rumanía en busca del tercer puesto.